El plan de reestructuración de Ford Motor empieza a tomar cuerpo. El fabricante estadounidense concreta ahora que el recorte de costes afectará a 7.000 empleados administrativos, equivalente al 10% de la plantilla global. Los despidos arrancarán esta misma semana, con unos 900 asalariados, con el objetivo de que esté completado el proceso para final del próximo mes de agosto. De ese total, unos 2.300 asalariados están en Estados Unidos.
El consejero delegado de Ford Motor, Jim Hackett, envió una carta a los empleados de la multinacional en la que explica el detalle del ajuste. Se hará mediante una combinación de bajas voluntarias y de despidos, al tiempo que se congela la oferta de nuevos puestos. El pasado enero ya se anticipó que prepara un plan que iba a afectar a miles de trabajadores en Europa, en concreto Alemania, Reino Unido y Francia.
El plan de reestructuración se detalla cuando se cumple el segundo año desde que Jim Hackett sustituyó a Mark Fiels al frente de la compañía. Entonces ya estaba en marcha un plan para reducir en un 10% los empleos administrativos en Norteamérica y Asia, lo que inicialmente iba a afectar a 1.400 asalariados. Era un primer paso para preservar la rentabilidad en un mercado que empezaba a moderarse, porque con la nueva ronda se incrementa.
En paralelo, el segundo fabricante de EE UU quería disponer de más liquidez para invertir en proyectos futuros de movilidad, como la tecnología de conducción autónoma. Con el recorte de plantilla concretado este lunes antes de la apertura de Wall Street, la compañía espera conseguir unos ahorros adicionales que estima en 600 millones de dólares anuales y espera “agilizar la toma de decisiones”.
La reducción de costes, insiste el ejecutivo, es una aspecto clave de la iniciativa Smart Redesign, como bautizó el proceso de reestructuración de la organización “para hacer una compañía más fuerte y bien posicionada para el futuro”. Las primeras ideas se presentaron en otoño del año pasado. “Ahora estamos entrando en la fase final”, indicó, “esperamos tenerlo completado para final de agosto”.
Del total de los despidos anunciados, la compañía indica que se eliminará el 20% de los cargos de gestión para “reducir burocracia” y así poder adaptarse con más rapidez a los cambios de tendencias. El plan de reestructuración en marcha tendrá un coste de unos 11.000 millones de dólares. “Para tener éxito en una industria tan competitiva”, justifica Hackett, “debemos centrarnos en el trabajo más valioso”.
Las notificaciones con los despidos se enviará este martes a los empleados afectados en Norteamérica, mientras las negociaciones progresan en Europa y América Latina. Las acciones de Ford Motor arrancaron la sesión prácticamente planas, pero arrastran una caída del 9% en el último año mientras que el índice S&P 500 se apreció más de un 5%. Hace unas semanas volvió a superar a Tesla en capitalización.
Los despidos de Ford Motor se anuncian justo cuando el presidente de EE UU, Donald Trump, presiona para que los fabricantes de coches creen más empleo en el país. El republicano ya cargó duro durante la campaña electoral contra la compañía y criticó especialmente a su rival General Motors, que está también en proceso de reorganizar sus operaciones y lo está haciendo con más agresividad, porque afecta a asalariados en la cadena de ensamblaje.
Source link