Cuatro años después de caer en el Mundial como país anfitrión, ‘Les Bleus’ regresan a la máxima cita femenina del fútbol con un nuevo seleccionador -tras la polémica destitución de Corinne Diacre por expresa petición de las jugadoras- decidida a destronar a Estados Unidos de su reinado.
Francia esperaba competir por el título en 2019, pero fue eliminada precisamente por las estadounidenses en los cuartos de final. Bajo los mandos ahora de Hervé Renard, quien renunció como entrenador de la selección masculina de Arabia Saudita para asumir el cargo, las galas vuelven a estar entre las grandes favoritas por talento individual, bagaje y un equipo muy compensado.
El estreno ante Jamaica debería ser, a priori, plácido. Es la quinta aparición de Francia en un Mundial y la segunda de Jamaica, que perdió sus tres partidos en su debut en 2019, anotando solo una vez y cediendo 12 goles.
El juego de las caribeñas en esta Copa del Mundo dependerá de la actuación de Khadija Shaw, la delantera del Manchester City que ha sido una de las dos únicas jugadoras en marcar al menos 20 goles en la Superliga Femenina Inglesa entre 2022 y 2023. Jamaica se halla inmersa en una dura batalla con su Federación, ya que es uno de los combinados que lucha por contar con mayores recursos y beneficios, por lo que sus jugadoras crearon la campaña ‘GoFundMe’ para recaudar fondos para sus preparativos hacia el Mundial.
Por parte de Francia, la capitana Wendie Renard serán clave para frustrar el ataque de Jamaica. La jugadora de 33 años. La acompañan nombres propios como Eugénie Le Sommer y Selma Bacha. Será la primera vez que estas dos naciones se enfrenten en una Copa Mundial Femenina