Victoria por la mínima de Francia ante Croacia que le vale para seguir en liza por un puesto en la semifinales. Croacia por su parte, al igual que Inglaterra, encadena dos derrotas y queda matemáticamente eliminada a falta de una jornada por disputar.
El partido empezó desde el principio con un dominio claro por parte del bando francés que, con la pelota, anuló a Croacia a base de poderío físico y superioridad en los balones divididos. Pronto tradujo ese dominio el conjunto galo en el marcador y en el 9’ se puso por delante gracias a un gol de Moussa Dembélé.
A partir de ahí el choque entró en una fase en la que ninguno de los dos tuvo ocasiones claras y en la que el marcador apenas se vio amenazado. Francia controlaba sin problemas las acometidas de una Croacia sin ideas en tres cuartos de campo que se escondía atrás y cuando debía salir no contaba con demasiados efectivos.
Ya en la segunda mitad, el ritmo subió pero con el mismo protagonismo para los franceses que no sufrieron en exceso para mantener el marcador a favor. Brekalo, por parte de Croacia, intentó llevar esa mordiente arriba cuando saltó al césped pero fue Kulenovic quien envió un balón al palo en la ocasión más clara para los balcánicos.
A partir de ahí, Croacia cogió más confianza sobre el campo y sí que se lanzó más al ataque con personalidad pero de nuevo se topó con Francia y su seguridad atrás.
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