Para combatir el frío seco que ya azota Pucela buena es una ración de Real Sociedad. Las condiciones del encuentro son inmejorables. Jornada que cae en puente, la Real asoma por puestos europeos y el horario acompaña. Desde primera hora de ayer fueron llegando los primeros aficionados txuri urdin a la cuidad castellana, que espera con mimo el choque de mañana.
Las 600 entradas que envió el club vallisoletano a Donostia volaron y se esperan algo menos de un millar de realistas que han conseguido entrada para dejarse la garganta en Pucela. Una invasión que quiere traerse los tres puntos de vuelta a casa.
La de Valladolid es una “una oportunidad perfecta” para sentir a la Real lejos de Anoeta. Ander
Oiarbide y su cuadrilla de Errenteria ya tienen planchada la blanquiazul para incluirla en la mochila. El grupo de cuatro jóvenes coge el coche mañana al amanecer para llegar “a potear” en la previa del partido: “Saldremos pronto, para llegar sobre las 11.00 h., y comenzar el tapeo, si nos da tiempo veremos algo la ciudad pero no es lo primordial”, arranca.
Oiarbide espera que “con la gente que vamos de Donostia y con los realistas del resto del territorio que se acercarán, seguro que se genera un ambiente magnífico”, desea.
El grupo de amigos no estuvo rápido y no verá el partido con el resto de la afición: “Cuando salió el precio de las entradas y vimos que eran de 50 euros, pensamos en no ir”. Sin embargo, la rebaja les cogió por sorpresa: “Cuando nos dimos cuenta de que bajaron a 35 quisimos comprarlas y desde el club nos dijeron que volaron”, lamenta.
Son muchos los que se han quedado sin ticket visitante, por lo que también veremos camisetas txuri urdin distribuidas por el Zorrilla: “Tenemos entrada justo en el otro lado, pero nos consta por amigos que tenemos allí que mucha gente de Castilla y León y alrededores ha comprado entrada en taquilla”, agrega. 1.000 almas para invadir ‘La Nevera’ y prender fuego en el ‘Estadio de la Pulmonía’.
“El lechazo no puede faltar”
El fútbol es lo más importante de las cosas menos importantes. Pero la cuadrilla también tiene tiempo para disfrutar de los manjares castellanos: “Tenemos reservada mesa porque el lechazo no puede faltar”. Eso sí, “hemos pedido hora prontito para llegar con tiempo al campo”, remarca.
Que la Real sea el tercer mejor visitante también anima al cuarteto: “Tenemos una ilusión ‘loca’, ver a la Real tan arriba y que si gana se mantiene en puestos de Champions es siempre un plus”, añade. La afición de la Real ha podido disfrutar de cuatro victorias lejos de casa esta temporada: “Este año como visitantes estamos ganando muchos partidos por lo que no podíamos faltar en Valladolid”.
Inseparables
A pesar de su corta edad -la cuadrilla de Errenteria no rebasa los 25 años- ya han viajado juntos a otros estadios: “Hemos visto a la Real llegar a Champions en Lyon y luego fuimos uno de los 6.000 de Manchester”. Se apuntan a todas cuando los estudios y el trabajo se lo permiten: “Además de los destinos cercanos como San Mamés, El Sadar y Mendizorrotza hemos estado en Los Pajaritos ante el Numancia y ante el Sporting en Gijón el año que acabamos sextos”. Les faltaba la capital castellanoleonesa: “Teníamos ganas de ver Valladolid y es la oportunidad perfecta”, dice Ander.
Los jóvenes aficionados ya calientan motores para enfrentarse a las heladas de Pucela. Esperan que el ambiente, los potes y sobre todo el resultado pueda con el frío vallisoletano. Oiarbide pronostica un 1-2 aunque no se fía nada de un extxuri urdin como Sandro: “Es el típico jugador que nos marca, esperemos que no se cumpla la ley del ex porque ese sí que sería un buen lechazo”, bromea.
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