Ahora que la vida del expresidente del Atlético
de Madrid Jesús Gil se ha hecho serie de ficción a través de Netflix, aquellos que le conocieron en vida, componen un puzzle de piezas sobre el histórico presidente colchonero.
En el caso de Carlos Alberto Gamarra, exfutbolista del Atlético de Madrid, le tocó vivir una de las épocas más convulsas del equipo rojiblanco. Le tocó vivir la intervención judicial del club, el descenso… Para un jugador como él que llegó con una larga trayectoria, su aventura española no fue la esperada.
“En el Atlético, fue diferente a mi paso por Benfica, fue frustrante . La gente estaba muy bien, teníamos un buen equipo, un buen entrenador, Ranieri, un equipo para pelear de la mitad hacia arriba de la tabla…”, señaló el jugador en una entrevista a Globoesporte en la que repasa su trayectoria.
“Sólo que en aquella época yo tenía un contrato por ‘dentro y por fuera’. El presidente del Atlético de Madrid, Jesús Gil y Gil, estaba un poco loco. Él hablaba que de que el rey era su hijo en aquel club, desafiaba al presidente, desafía a todo el mundo”, expuso.
Tras acabar la temporada 1999 con el Corinthians brasileño, se fue a la liga española, fichando por el Atlético de Madrid. El Atlético descendió en 2000, y Gamarra volvió brevemente a Brasil, esta vez para jugar en el Flamengo.
El paraguayo aún recuerda cómo se fue la intervención del club. “Un día estábamos entrenando y llegaron unos 50 vehículos de la policía y tomaron el club. La gente sólo podía cobrar el dinero que estaba recogido ‘por dentro’ (del contrato). Y ahí comenzó la crisis en el Atlético de Madrid. Era un administrador de la justicia el que dirigía el club y a partir de ahí comenzaron a salir los jugadores del equipo hasta que se hundió”, señaló el jugador.
“El Atlético acabó descendido por eso. Por los problemas del dueño con la justicia”, aseveró el paraguayo, que añadió: “La gente se encuentra muchos locos en la vida, no sólo en el fútbol”.
El sudamericano dice tener la conciencia tranquila de su paso por el club colchonero. “Yo estoy tranquilo con lo que hice. Pregunta por ahí cómo jugaba dentro del campo. Yo era muy valiente. Pero bueno, tiene que estar también un poco loco para reírte un poquito y poder contar las historias que estamos contando”, aseveró.
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