A Ricky Rubio, sin pausa con él los Cavaliers pero sin prisa, le queda mucho por alcanzar su máximo, ese Ricky incluso mejor que espera ser que aquel que se fue cuando. Pero cuando el narrador enloquece con un pase del catalán es síntoma inequívoco, que, aunque aún lejos, el base acelera hacia su mejor versión. Con una de esas asistencias ‘teledirigidas’ tan suyas, el de El Masnou adornó una actuación más discreta en el tiro pero magnífica en la dirección en la victoria de los Cleveland Cavaliers sobre los Milwaukee Bucks (114-102), con 3 puntos (1/6 en tiros de campo), 5 asistencias, 3 rebotes y 2 robos en casi 19 minutos para el ex del Barça y de la Penya.
Se trata del partido del que más minutos ha dispuesto Ricky desde su regreso la semana pasada después de descansar en la derrota del conjunto de Ohio ante los Warriors del día anterior. De nuevo sin Donovan Mitchell, quien sigue convaleciente de su lesión en la ingle, Evan Mobley pulverizó su máximo anotador en la NBA con 38 puntos (19/27 en lanzamientos), además de 9 rebotes y 3 asistencias. Los ‘Cavs’ también celebraron el regreso de Dean Wade tras un mes fuera por una lesión de hombro.
El habilidoso y versátil interior de los Cavaliers, capaz de marcar la diferencia en la pintura pero también penetrando desde el perímetro, hizo lo que quiso en la pintura de unos Bucks desprotegida sin Giannis Antetokounmpo. Al griego, con molestias en la rodilla, se le ‘atragantaron’ las palomitas en su quinta ausencia consecutiva al ver cómo el récord de su equipo en este tramo sin él vuelve a ser negativo con 2 triunfos y 3 derrotas.
En un encuentro en el que el equipo de J.B. Bickerstaff dominó con rentas cortas y se escapó en los últimos 6 minutos, Jrue Holiday asumió el protagonismo anotador en Milwaukee con 28 puntos y 10 asistencias, con Bobby Portis como otro de los destacados firmando 23 tantos y 11 rebotes.
Serge Ibaka, que busca un traspaso con los Bucks en este mercado -su contrato actual expira en junio-, fue baja de nuevo por razones personales. Se trata del sexto partido seguido que se pierde por esta razón el pívot, que, entre una enfermedad no Covid-19 y decisiones técnicas, sólo ha tenido minutos en dos encuentros en los dos últimos meses.
Lágrimas de Anderson Varejao
Los Cleveland Cavaliers homenajearon antes del encuentro al ex azulgrana Anderson Varejao por su trayectoria en la franquicia de Ohio, en la que militó entre 2004 y 2016 y en 2021. Varejao, jugador del Barça de Svetislav Pesic entre 2002 y 2004 y parte del aquel equipo azulgrana que ganó la primera Euroliga del club en 2003, ha vuelto recientemente a la organización como Consultor de Desarrollo de Jugadores y Embajador Global. No pudo evitar el brasileño que le brotaran las lágrimas.
No fue el único ex azulgrana presente anoche en Cleveland, pues, aparte de Ricky, también jugó Joe Ingles en los Bucks, con 8 puntos, 3 rebotes y 2 asistencias para el australiano. El base se pudo reencontrar con un Ingles con el que mantiene una relación especial, pues coincidió con él en tanto en el Barça como en los Utah Jazz.