El Granada comenzó a preparar este lunes el histórico partido que jugará el jueves en Los Cármenes ante el Nápoles italiano, correspondiente a la ida de dieciseisavos de final de la Liga Europa, con más malas noticias por la lesión del central Germán Sánchez y los problemas del medio Ángel Montoro, que es duda.
Tras perder el sábado ante el Atlético de Madrid (1-2) y completar un entrenamiento de recuperación el domingo, el equipo dirigido por Diego Martínez llevó a cabo esta mañana la primera de las tres sesiones previstas de cara al choque contra el Nápoles.
El entrenamiento comenzó con susto, ya que durante los primeros minutos de trabajo se produjo un terremoto de 3,5 grados de magnitud con epicentro en la localidad de Chauchina que se sintió de forma clara en Granada capital y toda su área metropolitana.
El equipo rojiblanco se ejercitó con la ausencia de varios jugadores que están lesionados y que son bajas seguras para medirse al Nápoles, el último de ellos Germán al sufrir una lesión fibrilar en el aductor derecho, informó el club en su parte médico.
La entidad, además, confirmó que el atacante colombiano Luis Suárez sufre una lesión fibrilar en el isquiosural derecho grado II-III que le mantendrá sin poder jugar entre ocho y doce semanas, y que Roberto Soldado padece también una lesión fibrilar en el isquiosural derecho grado II.
A las ausencias de Germán, Luis Suárez y Soldado, se unen las ya conocidas desde hace algunas semanas del medio Luis Milla y de los defensas Joaquín Marín ‘Quini’ y el colombiano Neyder Lozano.
Luis Milla, según el mismo parte médico, sufre una lesión fibrilar en el isquiosural izquierdo grado II-III, Quini una lesión fibrilar en el isquiosural izquierdo grado II y Neyder Lozano se mantiene lesionado de larga duración por un problema óseo en la tibia.
Completa el extenso parte médico rojiblanco el medio Ángel Montoro, que tampoco entrenó con el grupo este lunes por una sinovitis en la rodilla izquierda y es duda para el choque ante el Nápoles.
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