Giráldez conoce la cara y la cruz de la moneda

El hombre que se sentará este sábado en el banquillo del FC Barcelona como primer entrenador del conjunto azulgrana ya conoce la cara y la cruz de las finales europeas. Jonatan Giráldez aspira hoy a su primera Champions como primer entrenador tras haber saboreado la amargura de la derrota en Budapest en 2019 ante el Lyon y la felicidad de la victoria el curso pasado en Göteborg ante el Chelsea, ambas como asistente de Lluís Cortés en el banquillo.

Vigués de nacimiento y catalán de adopción, el técnico se ha ido labrando una carrera sin hacer ruido a base de formación y trabajo. Irrumpió en la esfera azulgrana como asistente de Lluís Cortés en enero de 2019 y en pocos meses vivió su primera final de la Champions. Muchos consideraron que llegó demasiado pronto, y de ahí el varapalo ante el Lyon con la derrota 4-1 y una superioridad abismal de las francesas. El curso pasado, todavía como ayudante de Cortés, fue uno de los hombres clave del ‘staff’ para conquistar el triplete, con esa primera Champions lograda en Göteborg ante el Chelsea. Ahora podrá por fin alzarse con el que sería su mayor éxito profesional y llega a la cita sin ser un recién llegado. Sabe lo que es ganar y lo que es perder un duelo como el de hoy, y tiene un plan. Solo falta ver si se cumple.