Los alcaldes de esas tres ciudades rechazaron el envío de fuerzas de seguridad federales en respuesta a las protestas raciales, para evitar así una escalada de la violencia.
El Departamento de Justicia del gobierno de Estados Unidos calificó este lunes de “jurisdicciones anarquistas” a las ciudades de Nueva York, Seattle y Portland, una fórmula legal que permitiría cortar la financiación con fondos federales a estas ciudades, todas ellas gobernadas por el opositor Partido Demócrata y escenario de protestas contra la violencia policial y el racismo.
Todas estas ciudades tienen en común que sus alcaldes rechazaron el envío de fuerzas de seguridad federales en respuesta a las protestas, para evitar así una escalada de la violencia, de acuerdo con Europa Press.
“Cuando las autoridades estatales o locales impiden hacer su trabajo a sus propias fuerzas y agencias de seguridad, se pone en peligro a ciudadanos inocentes que merecen protección, incluidos quienes se concentran y manifiestan pacíficamente”, aseguró el fiscal general estadounidense, William Barr, según recoge la cadena CNN.
“No podemos permitir que los dólares de los impuestos federales se malgasten cuando la seguridad de la ciudadanía está en juego. Espero que las ciudades identificadas hoy por el Departamento de Justicia den marcha atrás y se pongan en serio con sus funciones básicas de gobierno y empiecen a proteger a sus ciudadanos”, apuntó Barr.
La oposición demócrata criticó el carácter electoralista de la medida ante la cercanía de las elecciones presidenciales del 3 de noviembre, en las que Donald Trump busca la reelección frente al candidato demócrata, Joe Biden.