Más de 130 políticos, artistas y periodistas han exigido la puesta en libertad de Assange. Un exembajador ecuatoriano presuntamente ordenó que fuera espiado.
El exembajador de Ecuador en Londres, Carlos Abad, pidió a un exmilitar español que espiara todas las actividades del ciberactivista Julian Assange, mientras estuvo alojado en la sede de la embajada ecuatoriana en Londres, reveló el diario El País.
De acuerdo con declaraciones presentadas ante un juez español por David Morales, dueño de la empresa de seguridad que presuntamente espió al fundador de Wikileaks, su empresa fue contratada a través del servicio secreto de Ecuador, durante la administración de Rafael Correa.
En una primera declaración ante el juez, el empresario y exmilitar había negado acciones de espionaje en contra de Assange. Durante su nueva comparecencia responsabilizó al recientemente fallecido diplomático, Carlos Abad, de pedirle que grabara las conversaciones del ciberactivista.
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Desde julio de 2019 El País publicó que, a través de bitácoras, videos y audios, la empresa Undercover Global S. L., documentó cómo desde diciembre de 2017 a marzo de 2018, Assange sostuvo diversas reuniones con sus defensores en las que abordaron diferentes planes para sacarlo de la embajada y trasladarlo a Rusia o Cuba, sin embargo ninguno se llevó a cabo porque el fundador de Wikileaks los rechazó.
El diario español publicó en 2019 que las actividades de los vigilantes fueron más allá de grabar sus reuniones y reportar su estado de ánimo, por lo que en secreto le aplicaron una prueba grafológica a un informe de Assange y tomar muestras de heces de un bebé en un pañal para determinar el parentesco.
Protestan por su liberación
Un grupo de aproximadamente 130 periodistas, políticos y artistas han solicitado la liberación inmediata de Julian Assange, apelando a razones humanitarias y al “cumplimiento de los principios de un Estado de derecho”, reportó la televisora alemana Deutsche Welle.
Durante una rueda de prensa en Berlín, el periodista Günter Walraff, destacó la necesidad de preservar la libertad de prensa, y denunció que el fundador de WikiLeaks “no puede esperar un juicio en Estados Unidos ni un proceso de extradición en Reino Unido acordes con un Estado de derecho”.
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El 21 octubre de 2019 Assange compareció en la Corte de Magistrados de Westminster, en una audiencia de su proceso para determinar si es extraditado a Estados Unidos, donde enfrentaría 18 cargos por filtrar información confidencial. Medios reportaron que lucía avejentado y balbuciente.
En la corte, el australiano de 48 años de edad dijo con voz titubeante que no podía pensar de manera apropiada, manifestó su incomprensión de los procedimientos judiciales que calificó de inequitativos y lamentó que se encontrará en un lugar donde le es imposible acceder a información o a sus escritos.
Assange fundó en 2006 WikiLeaks, organización multinacional especializada en el análisis y publicación de bases de datos censuradas o de acceso restringido por gobiernos acerca de situaciones de guerra, espionaje y corrupción, con más de 10 millones de documentos publicados a la fecha.
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— WISE Up Action (@WISEUpAction) October 21, 2019