Diego Pablo Simeone, entrenador del Atlético de Madrid, respira. En nada podrá contar con Antoine Griezmann, como uno más, sin peros ni restricciones. El cuadro colchonero y el FC Barcelona tienen encarrilado el acuerdo del fichaje definitivo del francés por parte del equipo rojiblanco.
Un acuerdo por el que el Atlético, en vez de pagar los 40 millones de euros que se habían señalado inicialmente para la compra obligatoria en los dos años de cesión del futbolista, abonará algo más de la mitad, 20 millones, más dos más por objetivos fácilmente alcanzables por parte del jugador.
Si se ha llegado a un acuerdo no sólo ha sido por la disposición de los clubs, sino que el propio jugador ha tenido un papel clave, según fuentes conocedoras de la operación. Dichas fuentes, muy cercanas al desenlace positivo del tema, han destacado que “se ha resuelto gracias al amor y al sacrificio de Antoine por estar en el Atlético”.
En este sentido se remarca desde el Atlético que “ha puesto a todo su equipo de personas que trabajan con él a trabajar para buscar una solución”.
Un asunto que no era simplemente querer que se resolviese, sino que había que remangarse. Por ejemplo, en el Atlético entendían que con el actual sueldo del futbolista era inviable que se le pudiese fichar. En su momento, al volver del Barça ya se bajó el sueldo. Ahora, “el club le ha pedido un esfuerzo al que ha accedido para hacer viable” continuar a largo plazo en el Atlético. Y él ha vuelto a aceptar.
UN COMPORTAMIENTO IMPOLUTO
Fuentes conocedoras de la operación señalan así mismo que el comportamiento de Antoine Griezmann en todo este tiempo ha sido impecable. A pesar de su complicada situación, ni un mal gesto, ni una mala palabra, entrenamientos a tope. Para describir su comportamiento deslizan palabras como “responsabilidad, disciplina y profesionalidad”.
Siendo un jugador como él, con un cartel enorme y que no habría tenido problemas en encontrar un destino de campanillas, se remarca que hay pocos precedentes de estrellas de este calado, con el caché que tiene, que hayan accedido a “hacer un esfuerzo así” para seguir en un club al que, como es el caso de Griezmann con el Atlético, quiere.