Lewis Hamilton sorprendió con las declaraciones que realizó tras ganar el GP de la Emilia Romagna de F1 2020. En un clima de celebración por su triunfo ante Bottas y por la séptima corona consecutiva lograda por Mercedes en el Mundial de Constructores, el inglés removió un poco los cimientos del mítico circuito italiano de Imola con una bomba que pocos esperaban. Al ser preguntado por las dudas que ha mostrado Toto Wolff en relación a su posible continuidad el próximo curso como Team Principal del conjunto de Brackley, Lewis aclaró que su posición como líder en pista del cuadro de la estrella tampoco está asegurada.
“Ni siquiera yo sé si estaré aquí el año que viene, así que, realmente no me preocupa en este momento”, comentó el inglés tras su triunfo, destacando que es comprensible que Wolff tenga sus dudas.
“Lo entiendo, y tenemos muchas conversaciones profundas entre Toto y yo, así que soy muy consciente de dónde está él mentalmente, y creo que llevamos mucho peso juntos. He estado aquí mucho, mucho tiempo y definitivamente puedo entender querer retroceder un poco y dedicar más tiempo a la familia, y esas cosas”, agregó el británico.
¿Se trata de un aviso real de Hamilton?
Sin embargo, las declaraciones de Hamilton no deben tomarse al pie de la letra. El inglés sabe muy bien que no va a desaprovechar la oportunidad de continuar en Mercedes debido a que el año que viene será el favorito de nuevo al título y podría lograr el récord de coronas con su octavo cetro. Además, es consciente de que Mercedes le quiere como líder. La firma de la estrella y él están condenados a entenderse, aunque en las últimas semanas ambas partes han destacado los muchos detalles de los que todavía Hamilton y el conjunto deben tratar.
Wolff dijo hace semanas que intentaría que en las semanas de carrera su piloto se centrara en la pista. No quería despistarlo con las conversaciones de su futuro contrato. Por ello, Wolff dejó claro que se sentaría a hablar con el de Stevenage en las semanas de parón entre carrera y carrera. Anteriormente, tanto el campeón como el austríaco aseguraron que ambas partes querían continuar con su colaboración y que no estaban preocupados por las charlas. Estaban seguros de que alcanzarían a un acuerdo.
En este sentido, Lewis Hamilton comentó en el pasado GP de Portugal que quería quedarse en la F1, pero que la actual situación de crisis por el coronavirus podía afectar a los años de duración de su nuevo acuerdo. “Hay cosas sobre las que hablar, pero creo que me he ganado el puesto para quedarme durante un tiempo razonable. Las negociaciones nunca son fáciles”, argumentó, para nada preocupado por su situación, consciente de que Mercedes le quiere a él y no está hablando con ningún posible sustituto.
¿Mensaje para presionar a Mercedes?
Tras el pasado GP de Portugal, Toto Wollf, en Movistar F1, aseguraba entre risas que cada ves es más complicado renovar a Hamilton. “Es difícil, cada vez que hablamos es más caro”, expresaba en tono de broma. Pero de bien seguro que la cuestión económica también debería tener mucho que ver en este asunto. Tampoco sería raro que las palabras de hoy de Hamilton sirvieran para presionar a Mercedes a aceptar las pretensiones de un Lewis del que este verano el ‘Daily Mail’ decía que pedía la friolera cantidad de
44 millones al año en su nuevo contrato.
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