Lewis Hamilton vivió una carrera muy cómoda. Ganó sin oposición. No obstante, como suele hacer, el inglés magnificó un poco la dificultad de la cita. Aseguró que pasó mucho calor, que algo estaba roto en su asiento y que sufrió por mantener con vida sus neumáticos, llenos de ampollas. Incluso aseguró que pensó que incluso se le podía reventar una rueda. Pero lo cierto es que en su último giro, cruzó la línea de meta a 24 milésimas de la vuelta rápida lograda por Vettel, que había montado neumático nuevo.
VALORACIÓN
“Ha sido un muy buen fin de semana. He estado compitiendo mucho tiempo pero nunca es algo que envejezca para mí”.
UN RETO
“Siempre es un reto en la pista y haber intentado buscar los límites y reducir las diferencias, pero no lo podría hacer sin este grupo de gente increíble y toda la gente de la fábrica. Estamos haciendo historia juntos y estoy orgulloso. Valtteri también ha hecho un gran trabajo”.
EL CALOR Y LAS AMPOLLAS DE LAS GOMAS
“Ha hecho mucho calor. Estoy sudando muchísimo. Hay muchos baches. Es una gran pista en la que pilotar, con zonas muy técnicas en la que puedes ganar. No ha sido nada fácil. Siempre sucede algo. Todo está al límite. En estos coches es tal la temperatura, que estaba intentando ahorrar neumáticos, gasolina, tenía blisters en los neumáticos delanteros y estaba preocupado. Creo que a Lance Stroll se le reventó un neumático y estaba preocupado. Mi mejor comienzo de temporada de momento”.
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