El británico Lewis Hamilton, seis veces campeón del mundo de Fórmula Uno, elogió a su equipo Mercedes por adoptar una postura contra el racismo, pero tras ganar este domingo el Gran Premio de Estiria dijo que Ferrari y otros deberían hacer más.
Hamilton se arrodilló junto a otros 11 pilotos antes de la carrera mientras vestía una camiseta con el lema ‘Black Lives Matter’ y luego saludó con su puño en alto desde su monoplaza y en el podio tras lograr la victoria en el Red Bull Ring.
Fue el segundo fin de semana consecutivo en el que los pilotos se arrodillaron antes del inicio, aunque no todos lo hicieron.
Arrodillarse se ha convertido en un acto común de protesta contra el racismo y la brutalidad policial desde que un oficial de policía blanco provocó la muerte el pasado 25 de mayo en Minneapolis a George Floyd, un estadounidense de raza negra, que desató un torrente global de tristeza e indignación.
El gesto no formaba parte del programa oficial, como sí lo había sido antes del inicio de temporada en el mismo circuito austríaco cuando la Fórmula Uno y los equipos enfatizaron un mensaje antirracista.
“Hemos visto que los mecánicos de Red Bull se arrodillan, lo cual creo que es genial, igual que otras empresas y equipos. Pero si nos fijamos en Ferrari, que hablan de ser responsables consigo mismos y tienen miles de personas trabajando con ellos, no he sabido nada. No sé lo que van a hacer para su futuro “, dijo a periodistas el único piloto negro de la Fórmula Uno.
“Necesitamos que los equipos hagan eso. Necesitamos que la Fórmula Uno y la FIA sean más líderes en esos escenarios, diciendo ‘Hola chicos, todos juntos, todos debemos unirnos y luchar por esto’”, afirmó Hamilton.
“Creo que mucha gente no sabe cuál es el problema”, agregó el piloto británico, quien estableció una comisión para impulsar la igualdad de oportunidades y una mayor diversidad en el deporte del motor. “Algunas personas niegan que haya un problema”.
No hubo comentarios inmediatos de Ferrari, cuya carrera de este pasado domingo duró sólo 20 segundos hasta que Sebastian Vettel y Charles Leclerc chocaron entre si.
Vettel sí que se arrodilló junto a Hamilton antes de las dos carreras, mientras que Leclerc permaneció de pie pero luciendo el lema ‘End Racism’ en su camiseta.
“La Fórmula Uno nos dejó la opción de expresarnos de la manera que queríamos”, dijo Leclerc. “Estaba claramente escrito en nuestra camiseta ‘acabar con el racismo’, que es el mensaje principal que queremos transmitir”.
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