Nadie creía que los problemas que exhibió Mercedes el viernes en la primera jornada de entrenamientos en Bakú fueran reales. Se esperaba una enorme mejora de los de Brackley para este sábado, pero en los terceros entrenamientos libres se vio que el coche campeón debía sufrir en Azerbaiyán. Allí, Hamilton probaba la que debería ser su técnica para salvar los muebles en clasificación, terminando tercero con un rebufo de Pérez. Debía repetir la estrategia. Mercedes sabía que sin rebufo ninguno de sus dos coches podría pelear por la pole, y por ello, el muro del conjunto decidió sacrificar el primer intento de Q3 de Bottas, que debería entregarle su estela al británico.
Bottas y Hamilton prepararon su jugada con mucho descaro, algo que permitió que Leclerc se pegara al coche de Lewis y finalmente aprovechara el rebufo del campeón para lograr la pole. Mercedes se quedó así sin la pole por su propia medicina, pero por lo menos Hamilton cumplió su objetivo principal de poder salir por delante de un Max que sin embargo tiene mucho mejor ritmo de carrera que el de Stevenage.
“No lo esperábamos. Este es un resultado enorme para nosotros, porque hemos estado luchando como no se puede creer durante todo el fin de semana. Se nota, pero hemos mantenido la compostura, hemos seguido teniendo discusiones difíciles en el fondo, hemos seguido desafiándonos unos a otros y no hemos aceptado nunca un no por respuesta”, comentó Hamilton, que sin embargo no se refirió al rebufo en sus declaraciones posteriores a la clasificación ante los micrófonos de la F1.
Lo que sí dejó claro Lewis es que los cambios de reglamento que afectaron al fondo plano del coche hacen que Mercedes aún no entienda del todo el comportamiento de su monoplaza, algo que explicaría su bajón incomprensible de rendimiento en Mónaco y este fin de semana. “No creo que esta temporada nos ayude, es muy difícil conseguir que los neumáticos funcionen, no sabemos realmente lo que quiere el coche. Ahora estamos aquí arriba y con Valtteri en el Top-10. Ha sido un gran trabajo por parte del equipo”, expresó.
“El ritmo de carrera era mejor que el ritmo a una vuelta. No entendemos la razón, pero nos gustaría pensar que estamos en posición de luchar contra estos chicos mañana”, comentó Lewis, que el viernes sí tuvo un buen ritmo en tanda larga, aunque lejos de los Red Bull, los mejores en ese aspecto. Hamilton lo tendrá difícil este domingo para mantenerse delante de Max.
Verstappen: “Ha sido frustrante”
Por su parte, Verstappen, que quería aprovechar el mal rendimiento de Mercedes para arañarle el mayor número de puntos posible este fin de semana, se mostró decepcionado por lo ocurrido en la ‘qualy’. “Ha sido una clasificación muy frustrante por todo lo ocurrido. No teníamos rebufo tampoco. Es una pena. Creo que teníamos más pero es lo que es. Estamos terceros, podía haber sido mejor, pero también peor. tanta bandera roja en Q3 es frustrante. El ritmo de carrera es bueno, estoy contento. ¿Adelantar? Tampoco es fácil seguir al coche de delante. Dependerá más de mantener los neumáticos vivos”
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