Este jueves el árbitro neerlandés Pol Van Boekel, protagonista el pasado martes en el Inter-Barcelona por la jugada polémica de Dumfries, volvió a actuar como VAR en el duelo de la Europa League entre la Roma y el Betis, de nuevo con polémica ya que esta vez, sí vio penalti contra el equipo andaluz por unas manos. Una designación que, al igual que en el caso del duelo del equipo azulgrana, está designada desde hace ya cerca de dos semanas.
Y no es de extrañar que el neerlandés, considerado como uno de los mejores expertos en VAR de Europa, actúe la próxima semana de nuevo tanto en la Liga de Campeones como, ha sucedido esta semana, haciendo doblete en la Europa. Esto se explica en el mecanismo de designaciones que tiene UEFA para sus equipos arbitrales en las competiciones de clubes. Son designaciones por dos jornadas y la actual implica la tercera jornada que acaba de disputarse como la cuarta que arranca el próximo martes 11 de octubre hasta el jueves 14. La primera designación implicó las dos primeras jornadas que se disputaron a principios del pasado mes de septiembre.
Luego desde el estamento arbitral europeo no se volverán hacer designaciones hasta las dos últimas jornadas de esta fase de grupos de las competiciones de clubes. Jornadas que están fijadas para la última semana de este mes de octubre y la primera semana de noviembre.
Sólo entonces, en caso de no aparecer en alguna designación, supondría que habría “nevera” para el árbitro neerlandés. Algo que parece poco probable porque estamos hablando de uno de los colegiados mejor considerados en Europa con esta tecnología. Tanto es así, que está en la lista de árbitros VAR designados por FIFA para el inminente Mundial de Qatar y ya estuvo con UEFA en la pasada Eurocopa del 2021, entre otras competiciones.
De hecho la liga neerlandesa fue la primera en empezar a utilizar la tecnología de VAR en la temporada 2018- 2019. Sus designaciones tanto en la Champions como en la Europa Legue, acreditan el peso que tiene Pol Van Boekel en sus funciones como VAR.
Además, y según ha sabido este periódico, el neerlandés no contaba con una imagen lo suficientemente nítida en la sala de VAR del penalti de Dumfries, que explicaría que no llamara al colegiado al monitor para revisar la jugada o instase directamente al colegiado de campo a señalar el penalti.