La transformación tiene que ser disruptiva, tiene que cambiar paradigmas y crear inestabilidad para dar los resultados deseados, dice Luis Niño de Rivera.
El presidente Andrés Manuel López Obrador dijo que hay “condiciones inmejorables” para que la economía mexicana emprenda el camino del crecimiento, y agregó que en 2020 se mantendrán sin déficit las finanzas públicas.
Durante la clausura de la 83 Convención Bancaria en Acapulco, Guerrero, el mandatario, afirmó que “se seguirá respetando” la autonomía del banco central para que actúe con independencia, “sobre todo en lo relacionado con el control de la inflación”.
El Presidente abordó la necesidad de que los bancos tengan establecimientos en todo el territorio nacional, ya que de las casi 2,500 cabeceras municipales del país, en aproximadamente una quinta parte no hay una sucursal bancaria.
Añadió que los 500 mil millones de pesos en recursos federales destinados a los programas sociales del Gobierno Federal serán entregados a través de tarjetas de débito, por lo cual se requiere la construcción de una infraestructura bancaria que tenga presencia en todo el territorio nacional.
“Queremos que, así como el Banco del Bienestar va a construir 2,700 sucursales en todo el territorio nacional, así la banca privada pueda crear estas sucursales”.
Bancos ofrecen a AMLO trabajar juntos
Por su parte, los banqueros ofrecieron al presidente López Obrador trabajar en conjunto para generar una mayor confianza en México, a la par que se logra la transformación del país.
Durante la clausura del evento, Luis Niño de Rivera, presidente de la Asociación de Bancos de México (ABM), señaló que la administración eficaz requiere de estabilidad de procesos y controles, reglas claras, con una aplicación consistente, mientras la transformación tiene que ser disruptiva, tiene que cambiar paradigmas y crear inestabilidad para dar los resultados deseados.
“Le ofrecemos, señor presidente, trabajar juntos la banca y su administración para generar ese entorno de confianza a paso y medida que vamos cumpliendo con las tareas que transformen a México; solamente así juntos, compartiendo conocimientos y experiencias, podremos navegar exitosamente en estos mares desconocidos, inciertos y particularmente turbulentos”, afirmó.
Y es que, precisó, el mayor dilema del proyecto de transformación que ha puesto en marcha la administración actual está en la necesidad de abrir dos frentes simultáneos que demandan conocimientos y condiciones diametralmente opuestos.
En este sentido, detalló, por un lado la administración de la nación requiere que su avance económico no se detenga, mientras por otro está la disrupción y el cambio que lo lleve a ser potencia mundial con igualdad de oportunidades y con prosperidad para todos.
“Esta evidente contradicción nos atañe a todos los mexicanos, es un dilema nacional romper insanas prácticas establecidas durante los últimos 100 años al mismo tiempo que administramos el país para que las actividades productivas de todos continúen su marcha con mayor dinamismo”.
Con información de Reuters y Notimex.