Mario Hermoso, defensa del Atlético de Madrid, se retiró este miércoles lesionado en el minuto 68 del Memorial Jesús Gil y Gil contra el Numancia, al sufrir una dolencia en el tobillo izquierdo, que obligó a Diego Simeone a contar con el portero del filial Antonio Gomis como delantero a cuarto de hora del final para no jugar con diez el resto del duelo por ausencia de efectivos en el banquillo, una vez que Nahuel Molina no pudo disputar el duelo al no estar completado aún su fichaje.
En el minuto 66, Hermoso se lanzó al suelo y pidió asistencias por una dolencia en el tobillo. Después se retiró a la banda y, cuando iba a entrar de nuevo para probarse, mantuvo una breve conversación con Simeone, antes de retirarse definitivamente al banquillo.
Sin efectivos para jugar en el banquillo (ya habían jugado todos los convocados menos Nahuel Molina), el Atlético se quedó con diez jugadores sobre el terreno, hasta que Simeone decidió dar entrada a Gomis para jugar de delantero desde el minuto 76 hasta el final. Fue su debut con el primer equipo.