El entrenador del Casademont Zaragoza, Sergio Hernández, ha señalado que su equipo debería aprovechar la ventaja de que el Movistar Estudiantes no haya podido competir durante un mes para llevarse este miércoles la victoria de terreno madrileño. “Si nosotros tenemos dudas imagínate ellos. Van a sufrir las consecuencias del parón pero no se sabe si será en un partido o puede ser a la larga y ojalá que se recuperen porque somos todos de la misma familia, y más cuando tiene que ver con la pandemia. Nos gustaría ganarles pero que no les deje ninguna secuela el virus”, ha destacado en rueda de prensa.
A este respecto ha apostillado que ve un partido “complejo” porque no sabe qué jugadores del rival estarán aptos para jugar y que a ello se añade la llegada de Varea. Aún así, el técnico argentino dice preocuparse más de su equipo que del rival y que trata de subir un escalón “en el nivel de juego y en la identidad propia”. A pesar de ello reconoce la importancia del partido al ser el conjunto madrileño uno de sus rivales directos por alejarse de la zona de descenso.
Sin embargo, cree que el Casademont Zaragoza no debería necesitar esa motivación extra porque opina que todos los partidos son “finales del mundo” y que es algo que trata de transmitir a su equipo. “Si nos ganan que nos ganen pero que no perdamos nosotros por no tener la suficiente mentalidad o preparación”, ha resaltado.
La amplia derrota sufrida contra el TD Systems Baskonia en la última jornada dice que no les ha hecho tocar el botón de alarma porque sabían que podía ocurrir, aunque reconoce que “la sensación está en el cuerpo después de una derrota fuerte y dura”.
“Estamos con la resaca de perder por veintiocho y haber sido dominados de manera contundente por Baskonia pero con el tiempo vamos a capitalizar esa derrota. Debemos saber en qué debemos mejorar y pelear. No tengo dudas de que estamos mejor pero después hay que demostrarlo en la cancha. Estamos en un buen momento”, ha asegurado.
Igualmente cree que jugar un partido poco tiempo después de una clara derrota está bien para “aprovechar ese espíritu competitivo que te alimenta y te ayuda a dar el máximo cada día”.
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