DENVER – Por primera vez desde 1998, el Juego de Estrellas de la MLB se jugará en Colorado.
Este martes, las Grandes Ligas (MLB) hicieron oficial el traslado del juego de Atlanta, Georgia al Coors Field de Denver este verano. Dijeron que eligieron a los Rockies porque ya estaban en el proceso de licitación para albergar un futuro Juego de Estrellas.
Los Rockies habían proporcionado un plan detallado para el hotel, el espacio para eventos y la seguridad que tomó meses ensamblar, y el personal de MLB ya había realizado varias visitas a Denver.
Las Grandes Ligas anunciaron que el Juego de Estrellas de la MLB, planeado para realizarse el 13 de julio en Atlanta, Georgia, tendría que ser reubicado por una polémica relacionada con el sistema de votación en ese estado, en donde muchos consideran que limita injustamente el acceso a las urnas, especialmente para la gente de color.
El comisionado de la MLB, Rob Manfred aseguró tras el anuncio “he decidido que la mejor manera de demostrar nuestro valor como deporte es reubicar el partido”.
Luego de que se conociera la noticia, múltiples gobiernos locales empezaron a trabajar para lograr obtener la sede del juego, que es una oportunidad importante para reactivar la economía y el turismo, tras un 2020 complicado marcado por la pandemia.
Ese fue el caso de Jared Polis, Gobernador de Colorado, que le confirmó a Telemundo Denver que desde el viernes se encontraba haciendo llamadas y gestiones para dejarle saber a la liga que el estadio Coors de Denver estaba disponible en caso de ser requerido.
Antes de que el anuncio fuera oficial, el alcalde de Denver Michael Hancock aseguró que su gobierno está feliz y emocionado con la posibilidad y que esperarán una decisión final de la liga.
Al momento no se sabe, cuántos fanáticos podrían asistir por las restricciones del COVID-19.
Los Rockies tienen permitido en estos momentos el 42.6% del aforo total del estadio, lo que representa 31,363 fanáticos de los poco más de 50,000 que entran en épocas normales.
De hecho, el estadio de los Rockies es el segundo del país con permiso para recibir a más fanáticos, solo por debajo del estadio de los Texas Rangers que está recibiendo más de 40,000 personas por partido.