Hope Solo (40 años) se ha visto envuelta en una nueva polémica. La exguardameta de la selección de fútbol de Estados Unidos ha aceptado que conducía bajo los efectos del alcohol hace cuatro meses, cuando fue hallada inconsciente detrás del volante, en Carolina del Norte, con sus mellizos de dos años al lado.
La exjugadora fue acusada de un delito menor de abuso infantil y de resistirse a un oficial público durante el incidente que tuvo lugar el 31 de marzo y que dio la vuelta al mundo a través de los medios del país. Ahora, la investigación ha dado un nuevo giro.
En un comunicado la oficina del Fiscal de Distrito del Condado de Forsyth, el juez le dio a Solo una sentencia de 24 meses de suspensión del carnet de conducir y una sentencia activa de 30 días. Es decir, le dio un margen de 30 días para pasar por un centro de rehabilitación y le ordenó pagar 2.500 dólares en multas y 600 del coste de la prueba de laboratorio.
“Ha sido realmente el peor error de mi vida. Subestimé lo destructivo que se había convertido el alcohol en mi vida”, ha indicado la exjugadora ahora en un comunicado, para admitir que conducía ebria y declararse “culpable”.
Hope Solo fue arrestada en el estacionamiento de un centro comercial en Winston-Salem. “Fue increíblemente duro y cometí un grave error”, ha añadido. La concentración de alcohol en el cuerpo de Solo fue de 0,24%, tres veces el límite legal.
Hope Solo, con sus dos mellizos