El veto del gobierno estadounidense a Huawei ha dejado a los usuarios de móviles de la marca china sin la Play Store (la tienda de aplicaciones de Google) y sin apps tan populares como Gmail, Google Maps o Youtube. El fabricante sigue aún así intentando hacerse un hueco fuera del país asiático. Este miércoles ha lanzado en el mercado europeo dos potentes teléfonos para conseguirlo: el Huawei P50 Pocket, un plegable con el que busca plantar cara a Samsung, y el Huawei P50 Pro, un buque insignia que aspira a convertirse en el rey de la fotografía. Ambos móviles destacan por un diseño llamativo y un potente procesador, pero no son compatibles con los servicios de Google ni las redes 5G.
El Huawei P50 Pocket recuerda al Samsung Galaxy Z Flip 3. Es un plegable tipo concha que doblado cabe en cualquier bolsillo y abierto puede ser utilizado como un móvil tradicional. Desde la marca china presumen de que el teléfono está entre los más delgados del mercado: “Obtener una bisagra que sea duradera y que permita un pliegue tan plano como este es una maravilla de la ingeniería”. Mientras que el grosor del terminal desplegado es de 7,2 milímetros, cuando está plegado es de 15,2 milímetros. El dispositivo pesa 190 gramos —frente a los 183 gramos del Galaxy Z Flip o los 275 del Oppo Find N—.
En su trasera, tiene dos grandes círculos bastante llamativos. Uno corresponde al módulo de cámaras. El otro a una pantalla exterior de 1,04 pulgadas pensada para consultar notificaciones o controlar la música que se reproduce en el móvil. Este panel incluso incorpora una función que en teoría sirve para proteger la piel al verificar si el rostro está correctamente cubierto con crema del sol. Además permite configurar un modo “superprivacidad” para apagar el micrófono, la cámara o el GPS cuando el móvil está plegado.
La pantalla principal, de 6,9 pulgadas y un formato 21:9, tiene una tasa de refresco que alcanza los 120 Hz. Este parámetro hace referencia a la cantidad de veces que la pantalla se actualiza por segundo. Por lo tanto, cuanto más alta sea, más fluidos son los desplazamientos entre pantallas y aplicaciones. Aunque también se gasta más batería. La tasa del panel exterior es de 60 Hz.
En el apartado fotográfico, además de una cámara frontal de 10,7 megapíxeles, el Huawei P50 Pocket incorpora tres cámaras traseras: un sensor principal de 40 megapíxeles, un ultra gran angular de 13 megapíxeles y un ultra espectro de 32 megapíxeles. Uno de los puntos fuertes de los móviles plegables como este es que las cámaras exteriores sirven también para hacerse selfis de mayor calidad. El usuario puede utilizar la pantalla secundaria como espejo para ver cómo va a salir la foto.
El terminal cuenta con uno de los procesadores más potentes de Qualcomm para la gama alta, el Snapdragon 888, y está disponible en dos modelos: uno de 8GB de RAM y 256 GB almacenamiento y otro de 12 GB RAM y 512GB de almacenamiento. La batería es de 4.000 mAh —frente a la de 3.300 mAh del Galaxy Z Flip 3—. El precio del móvil parte de los 1.599 euros.
Huawei P50 Pro
El gigante chino también ha lanzado este miércoles en Europa el Huawei P50 Pro, un buque insignia que destaca por un diseño llamativo y una fuerte apuesta en el apartado fotográfico. El terminal tiene una pantalla de 6,6 pulgadas y una tasa de refresco de 120 Hz. En su trasera, cuenta con dos grandes circunferencias muy vistosas que integran cuatro cámaras en su interior. La marca las compara con “dos ojos deslumbrantes que brillan dondequiera que vayas”.
Porque si hay algo en lo que el Huawei 50 Pro destaca, es en el apartado fotográfico. A la cámara principal de 50 megapíxeles se suma una con sensor monocromo de 40 megapíxeles, un gran angular de 13 megapíxeles y un telefoto de 64 megapíxeles. Este último sensor permite un zoom óptico de 3,5 aumentos y uno digital de hasta 100 aumentos. Habrá que esperar para ver hasta qué punto funciona esta última opción, ya que con otros móviles como el Huawei P40 Pro+ y el Samsung Galaxy S21 Ultra las fotos salen borrosas y resulta preferible utilizar un trípode.
Andres Zimmer, jefe de producto en Europa occidental de Huawei, subraya que las cámaras están además equipadas con inteligencia artificial para conseguir “colores reales e imágenes estables incluso a una gran distancia”. El móvil cuenta además con funciones pensadas para capturar acciones en movimiento y con un motor que promete capturar patrones y texturas con mayor detalle y nitidez.
En esta ocasión, Huawei también ha apostado por el procesador Snapdragon 888, una de las opciones más potentes de Qualcomm para la gama alta. El terminal, que tampoco es compatible con las redes 5G, cuenta con 8 GB de RAM y 256 GB de almacenamiento. Además de una batería de 4.360 mAh, el móvil tiene una carga rápida de hasta 66 W. Su precio parte de los 1.199 euros.
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