Zlatan Ibrahimovic sin duda ha sido una de las claves para que el Milan termine el año como líder de la Serie A. El delantero sueco, de 39 años, sigue siendo un referente para el equipo ‘rossonero’, donde se encuentra como en casa.
“Aquí me siento como en casa, los días son agradables, todos me quieren, aquí todo funciona. Me tratan como a un comandante”, indicó el jugador en una entrevista en Corriere della Sera.
Para el año entrante, Ibra asegura que el Milan debe tener ambición. “Debemos empezar bien 2021, seguir adelante juntos los partidos, como si fueran el primero y el último de la vida al mismo tiempo. Siempre debemos tener más hambre”.
El sueco explicó cómo fue pasar el coronavirus. “Tenía un dolor de cabeza, no muy fuerte, pero molesto. Estaba cabreado, no podía salir ni entrenar bien. En un momento estaba hablando con la casa y dando nombres a las paredes. Se vuelve un hecho mental, te imaginas todos los males sobre ti”.
Ibrahimovic reconoce que tener lejos a la familia es lo que lleva peor. “Los extraño tanto, no puedo soportarlo más. Mi esposa y mis hijos viven en Suecia y van a la escuela allí. Ni siquiera puedo ir a verlos. Son lo más importante, en cada decisión futura mi familia siempre será lo primero. Pioli me dijo que tengo 2 muchachos allí, pero también 25 en Milanello que me necesitan“.
Por último, el delantero asegura que tener 39 años no le impide ser decisivo. “¿Existe la edad? No. Es todo y solo una cuestión de mente”.
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