Iker Torre, con total normalidad


Un desvanecimiento durante un entrenamiento, el pasado mes de enero, encendió todas las alarmas en torno al estado de salud de Iker Torre (Orio, 1982), pero las posteriores exploraciones detectaron una arritmia benigna, muy frecuente entre los deportistas. El veterano delantero oriotarra empezó su particular proceso de recuperación con vistas a volver al terreno de juego y poder despedirse del fútbol profesional desde el verde, aunque la crisis del coronavirus dejó en el limbo esa posibilidad. Hasta ahora.



Porque el Yeclano ya ha vuelto a los entrenamientos, todavía en grupos reducidos, con la vista puesta en el playoff de ascenso a Segunda que debe afrontar el mes que viene en Marbella, Málaga y Algeciras. La mejor noticia es que Iker
Torre, con el alta en la mano, es uno más en el trabajo junto a sus compañeros. “Estoy bastante tranquilo, con total normalidad”, confirma. “Me lo tomé como un susto, los cardiólogos me dijeron que me puede volver a pasar, pero como a cualquier persona”, avisa.

Calzarse las botas y volver a tener contacto con el balón es lo que más echaba de menos el veterano delantero. “Me he machacado bastante y de momento no he acusado la inactividad”, celebra Torre, que tenía “bastantes ganas” de regresar tras estar parado desde enero. “Estoy con una ilusión tremenda por disputar el playoff”, reconoce, consciente de que la temporada pasada el Yeclano estaba en Tercera y ahora, con el 70% de aquella plantilla aún en el equipo, se encuentra a las puertas de la división de plata.

El conjunto murciano ha reanudado los entrenamientos con fuerzas renovadas. “Volvimos hace un par de semanas. El arranque fue más suave y ahora hemos empezado a trabajar en dos grupos, con más balón y ejercicios amenos, entretenidos y cañeros”, describe el punta curtido en mil batallas. Al fin y al cabo, “si quieres volver a disputar los playoff hay que acostumbrarse lo antes posible”, advierte. Bajo unas estrictas medidas de higiene que no han afectado al curso de la actividad diaria, el Yeclano mantiene su rumbo inalterable.

Con ganas de más

Esta temporada iba a ser la última de Iker
Torre en activo. Le convencieron para continuar y ahora mismo el futuro, con todo lo que ha sucedido en los últimos meses, no está despejado. “Le he dado varias vueltas en los últimos días porque al principio de temporada dije que mucho tenían que cambiar las cosas para que siguiera. Y mira si han cambiado”, dice con una sonrisa.

Así las cosas, tiene un regusto amargo. “Me sabe a poco esta temporada porque llevo desde enero sin jugar. Ya veremos. Quiero centrarme en el playoff”, mantiene. En la fase decisiva, a partido único, que se avecina, el Yeclano no piensa en arrojar la toalla. “Lo hemos mantenido durante la temporada. Somos un botecito pequeño contra trasatlánticos y nos lo hemos ganado”, saca pecho. Por lo tanto, “ahora viene más de lo mismo aunque mucho más complicado”. Sin embargo, Iker
Torre y su Yeclano tienen serias opciones de meter la cabeza en Segunda.


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