Los pueblos donde nacieron o crecieron grandes personalidades de la historia, tanto pensadores, como pintores, escultores o estrellas del cine y del deporte, suelen ser lugares de culto para miles de fans, a los que acudir para visitar y saber más de los orígenes de un ídolo mundial. Sin embargo, la ciudad de Manheim, una pequeña localidad que pertenece al municipio de Kerpen (cerca de Colonia), en la que creció por sus calles el 7 veces campeón del mundo de F1 Michael Schumacher, va camino de dejar de existir en los próximos meses.
Ya hace años que las autoridades alemanas así lo decidieron. El motivo: la expansión de una mina de lignito, un tipo de carbón. De hecho, según lo que publicó en 2019 el Rheinische Post, todo el pueblo debía ser derruido y quedar absolutamente vació ya en 2022. Un año ha pasado desde esa fecha, y según diarios internacionales, el pueblo, en el que hace solo unos años vivían 1.700 personas, es ahora “un pueblo fantasma” (como se puede apreciar en el vídeo que añadimos a continuación).
Ahora, entre sus calles, aún quedan bastantes casas en pie con las persianas bajadas, aunque a simple vista se nota la dejadez propia de un sitio en el que ya no queda prácticamente vida. Tan solo quedan 12 habitantes, un pueblo fantasma que va a ser derruido.
El resto de antiguos habitantes ya se marcharon, aceptando las importantes ofertas de la empresa eléctrica alemana RWE. Las 12 personas que quedan deberán marcharse pronto.
La iglesia sí quedará en pie finalmente
Su templo religioso, una iglesia protegida como la de St. Albanus y Leonhardus, se salvará de tal demolición, pero ya no servirá de hogar de culto para nadie. Allí se vivió una última misa en 2019, en la que participaron 400 personas. 150 manifestantes y representantes del movimiento climático estudiantil Fridays for Future se reunieron frente a la iglesia para oponerse a la expansión de la mina de carbón. Pero no lo lograron.
De hecho, las crónicas locales contaron que la comisión designada por el gobierno acordó que la producción de energía a través del carbón en Alemania debía terminar como máximo en 2038, algo contrario a las acciones que se han llevado a cabo en el país, en el que varias aldeas en áreas mineras de carbón aún tienen programada su demolición para permitir la expansión de estas minas de carbón.
Manheim, el pueblo en el que creció Michael Schumacher, a punto de desaparecer
Manheim, el pueblo en el que creció Michael Schumacher, a punto de desaparecer
Manheim, el pueblo en el que creció Michael Schumacher, a punto de desaparecer
Derruido en los próximos meses, pero algo se salvará
Ahora, las máquinas excavadoras ya han arrasado con todo en los aledaños de la aldea. Todo está listo para que de 2024 entren en pleno Manheim para su demolición definitiva. Debido a la proximidad con el bosque de Hambach, espacio protegido por su valor ecológico, la casa que fue propiedad de la familia Schumacher, la pista de karts ‘Erftlandring’ y la citada iglesia se salvarán de la demolición, pero lo harán en medio de la nada.
Manheim, el pueblo en el que creció Michael Schumacher, a punto de desaparecer
Manheim, a 12 minutos de Kerpen
La casa de Michael y Corinna y el lugar en el que se casaron
No se salvará en cambio la casa en la que vivieron Michael Schumacher y su esposa, Corinna, antes que que se mudaran a Münich. Ni la sede municipal en la que ambos se casaron en 1995 con una matrimonio civil.
Ese matrimonio civil fue noticia en todo el mundo. Michael Schumacher se casó con Corinna Betsch en su pueblo natal de Kerpen-Manheim en agosto de 1995 en un día lleno de controversia por lo ocurrido la jornada anterior. El día anterior al enlace, por la mañana, Michael emitió un comunicado oficial anunciando el aplazamiento de su boda debido a que se había filtrado la noticia, el lugar y la hora. Quería que fuera algo íntimo y eso lo iba a impedir. Por eso, anunció que la boda se posponía, pero no fue más que un intento de distracción, puesto que finalmente allí se casaría como estaba inicialmente previsto.
¿Por qué no tuvo otro futuro?
Ese lugar bien podría ser un punto más de visita en un precioso ‘tour’ por la juventud y vida de Michael Schumacher, en un lugar merecedor de un museo. ¿Por qué no es así? Eso es lo que se pregunta todo amante a la Fórmula 1. Nada de eso va a ocurrir. Un pueblo que podría recibir a miles de visitantes al año para conocer la historia del ‘Kaiser’, se ha convertido en una aldea fantasma. En unos meses dejará de existir.