La tecnología no deja de sorprendernos. Hace poco hablábamos de los numerosos avances en el mundo del transporte con los novedosos aviones eléctricos, una nueva forma de viajar que ahorrará al planeta una gran cantidad de gases de efecto invernadero. Pero ahora nos vamos hasta el campo de la música para sorprendernos con YuMi, un espectacular robot humanoide que ha debutado recientemente como director de orquesta.
El robot musical
Lo primero que piensas si ves este título es en ese típico juguete electrónico para niños que suelta expresiones al mismo tiempo que parpadean sus luces de colores. Nada más lejos de la realidad, ya que YuMi ha sido capaz de realizar las labores de un auténtico director de orquesta. Además de una forma más que satisfactoria. Este robot perteneciente a ABB ha conseguido lo imposible durante el Primer Festival Internacional de Robótica de Pisa. Una imagen que ha dado la vuelta al mundo y que resulta tan peculiar como sorprendente.
La Filarmónica de Lucca estaba preparada, las cuerdas afinadas, los pulmones cargados de aire y los mecanismos engrasados. Sí, los mecanismos, porque este extraordinario robot tuvo que mover con gran astucia sus metálicos brazos para dirigir dos conocidas composiciones: «O Sole Yumio» y el aria «La donna e’mobile» de Verdi.
Un director consagrado
Aún queda un largo camino por delante en la búsqueda de la perfección en este tipo de robots. Pero declaraciones como la del maestro Colombini, director habitual de la orquesta de Lucca, nos hacen pensar que el proyecto está dando unos grandes resultados. «YuMi tiene una gran fluidez y mejora en la gesticulación en sus movimientos, así como también un increíble matiz de expresión». Un robot especial que sustituye a su antecesor «Asimo», un dispositivo creado por Honda que fue capaz de dirigir con algún que otro problema la orquesta sinfónica de Detroit en 2008.
Cabe destacar que YuMi tampoco es que haya tenido un mal profesor, ya que fue el propio Colombini el que enseñó a robot todo lo que sabe. Una ardua tarea que ha dado resultados después de años de práctica. Ahora el propio maestro ve al robot como una «amenaza» debido a la perfección del mismo a la hora de dirigir. Todo un espectáculo.
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