Desde el 28 de febrero de 2020, la Unidad de Inteligencia Financiera habría abierto una investigación a la familia Barrios, según un documento entregado a Aristegui Noticias por parte de René Bejarano.
En los expedientes, el presidente del Movimiento Nacional por la Esperanza y esposo de Dolores Padierna -la excandidata de Morena que perdió en la alcaldía Cuauhtémoc y se alista a impugnar los resultados-, señala que existe una ficha informativa que relaciona a este clan familiar .
“Ahí vienen depósitos en efectivo por millones de pesos, cheques para comprar inmuebles, compra de vehículos de lujo; ingresos que se han incrementado en millones de pesos desde 2017”, dice Bejarano.
Asegura que también existen 176 expedientes, sobre decenas de inmuebles, casas o plazas comerciales, de los que se han ido apoderando, propiedades que en conjunto valen cientos de millones de pesos.
La parte acusadora le entregó el expediente; los afectados que eran extorsionados son los que acusan a Diana Sánchez Barrios y a su familia, asegura.
“Esto no es un grupo de personas humildes que defienden ambulantes, esto es un consorcio vinculado a grandes intereses económicos que desde hace tiempo se han querido apoderar de la alcaldía, que tienen intereses muy claros, que acuden a métodos ilegales para empoderarse”, dice.
“Y esto es lo que está detrás, y que van a incluir si es que Sandra Cuevas llega al gobierno, porque ellos están acostumbrados a cobrar sus servicios, los van a presionar; son miles de personas controladas en diversos colonias de la Cuauhtémoc; eso es lo que está de por medio”.
Sin embargo, dice, no todos los ambulantes, que son entre 60 mil y 65 mil, pertenecen a ese grupo, pero cada vez más los van controlando con métodos indebidos, incorrectos y violentos.
Durante la entrevista, Bejarano mostró el documento de la UIF en el que se detallan movimientos bancarios, compra y venta de bienes, donaciones y hasta información fiscal.
“La Unidad de Inteligencia Financiera recibió una solicitud de análisis sobre la familia Barrios. Se llevó a cabo la revisión de los sujetos participantes: Alejandra Barrio y sus hijas Diana Sánchez Barrios y Graciela Edith Coronel Barrios”, señala el documento en sus primeras líneas.
En el recuento, también se incluye a Luis Alberto Vargas Ruiz, esposo de Sánchez Barrios.
De acuerdo con fuentes abiertas, señala la dependencia, se sabe que la FGJ abrió investigaciones penales contra Luis Alberto Vargas Ruiz (relacionado con la Unión Tepito) y Diana Sánchez Barrios por violencia, extorsión y amenazas. Sánchez Barrios defiende la permanencia y expansión del comercio informal, con amagos de protestas, bloqueos y descalificaciones hacia la actual jefa de gobierno de la CDMX.
Según la UIF, Sánchez Barrios, entre 2013 y 2019, registró depósitos en efectivo por 7.7 millones de pesos, el 97% en 2017 y 2018.
Entre 2013 y 2018, reporta ingresos por 12.3 millones de pesos y a partir de 2017 un incremento significativo.
En 2016, cita el documento, compró un departamento en 6 millones de pesos y su pareja vendió un terreno en 3.1 millones de pesos.
Tras la descripción de estos y otros movimientos más, la dependencia señala que el registro presenta inconsistencias fiscales, por lo que podría cometer delitos fiscales, funge como recaudadora de derecho de piso, se identificó uso intensivo de efectivo y posible captación de recursos de procedencia ilícita.
De Vargas Ruiz, esposo de Diana, la UIF señala que de acuerdo con fuentes abiertas lidera un grupo de cargadores y golpeadores que se apropian de inmuebles mediante juicios simulados.
En cuanto a sus gastos, señala que discrepan con sus ingresos, por lo que podría incurrir en delitos fiscales. Incluso, destaca que de 2013 a 2016 y en 2018, presentó declaraciones anuales en ceros.
“Se desconoce la procedencia de los recursos así como su actividad”, agrega.
Sobre Coronel Barrios, dice que de acuerdo con fuentes abiertas, es lideresa de 2 mil ambulantes e invasores de inmuebles.
Entre los movimientos señalados, destaca que en 2015 recibió depósitos en efectivo por 2.4 millones de pesos en nueve operaciones, que van de 200 mil y 400 mil pesos.
También registra transferencias internacionales por 9.5 millones de pesos entre 2017 y 2019, destacan cuatro de ellas, por un total de 4.4 millones de pesos hacia Suiza.
“Presenta inconsistencias fiscales e intenso uso de efectivo”, señala el documento.
Mientras que de Alejandra Barrios Richard, identificada como líder de los comerciantes ambulantes de la Ciudad de México desde 1983, la UIF señala que ella y su familia defienden la permanencia y expansión del comercio informal.
“Presidenta de la Asociación Legítima Cívica Comercial, considerada como un grupo de presión”, agrega
Según la UIF, se tiene un reporte del sistema financiero por operaciones de depósito en efectivo de manera fraccionada y alta velocidad en el movimiento de la cuenta. En una operación presenta coincidencias en negative file por lavado de dinero, agrega; la considera cliente de alto riesgo.
Entre los movimientos que registra, figuran que recibió 7.7 millones de pesos a través de speis entre 2012 a 2019; que declara ingresos por 51.2 millones de pesos entre 2013 y 2018, con incremento significativo a partir de 2016.
“Recaudadora de derechos de piso”, dice la UIF. “Se advierte uso intensivo de efectivo y posible captación de recursos de procedencia ilícita”.
“Dime qué líder del comercio en la vía pública recaba ingresos por casi 60 millones de pesos”, expresa Bejarano.
Este es el grupo político que está protegido por el PRI y el PAN, qué influyó indebidamente en la elección, que obtuvo una diputación local en la alcaldía y que está pretendiendo expandirse más, sostiene.
“Todo mundo sabe cómo opera en esta alcaldía ese grupo”, expresa.
Incluso, dice, en 2003 Alejandra Sánchez Barrios fue acusada de asesinato, pero el gobierno de Mancera terminó liberándola.
El gobierno de Mancera también protegió al grupo de Cuauhtémoc Gutiérrez, agrega.
El conflicto poselectoral
La entrevista con René Bejarano se da en el marco de una serie de acusaciones entre Dolores Padierna, excandidata de Morena a la alcaldía de Cuauhtémoc, y Diana Sánchez Barrios.
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Padierna perdió las elecciones frente a Sandra Cuevas, de la coalición PRI-PAN-PRD.
En entrevista con Aristegui Noticias, Padierna sostuvo que el triunfo de la candidata de la oposición fue apuntalado por las “mafias” de esa demarcación: la de Diana Sánchez Barrios (actualmente presa); la de Cuauhtémoc Gutiérrez de la Torre, actualmente prófugo; e incluso La Unión Tepito. Padierna ha impugnado las elecciones del 6 de junio.
Según Bejarano, se han lanzado acusaciones terribles contra él y Padierna por la familia Barrios, pero que lo único que buscan es defenderse y que sus delitos queden en la impunidad.
Desde antes de la designación, asegura, hubo fuego interno, guerra sucia, para tratar de impedir que Padierna consiguiera la candidatura.
Narra que habló con Ricardo Monreal el martes anterior a la elección, para evitar que apoyara a otros partidos, particularmente Fuerza por México, y fortalecer a Morena, pero ya era muy tarde; faltaban unos días para la elección y Padierna no contó con el apoyo.
Bejarano dice que el PRI pagó a personas para comprar sus votos en la Cuauhtémoc, mediante la toma de fotografías de las boletas con un folio que identificaba a cada persona; con pagos de mil a 3 mil pesos por voto.
“Son miles de votos comprados”, sostiene.
“En redes sociales, han circulado muchas pruebas de cómo se compró el voto, obligando a determinadas personas a tomar fotos, con un folio volante, que obligaba a identificar quién había votado y por qué partido, básicamente por el PRI”.
Denunció también gastos no reportados en las campañas, como la impresión de mantas. Estas pruebas se adjuntan a una denuncia y buscan que se anule el resultado de la elección.
Bejarano niega que hubiesen buscado una alianza, como lo afirmó Sánchez Barrios.
“Lo que se platicó fue que se llevaran las cosas tranquilas, que no hubiera violencia, que no hubiera compra de votos, como en otras elecciones; yo nunca hablé ni con Alejandra ni con Diana”, sostiene.
Sin embargo, dice, cuando Alejandra Barrios lanzó algunas acusaciones en medios, Diana le envió un mensaje de voz sobre esos acuerdos, cuando lo único que pidieron fue un proceso pacífico
“De ahí a una alianza eso es otra historia; ellos están en otro proyecto, no había manera”, agrega.
Describe que algunos de los grupos involucrados tienen que ver con los intereses que a lo largo de décadas se han venido consolidando al interior de la alcaldía y que algunos de ellos tienen métodos que se alejan de la legalidad o que presumiblemente constituyen delito
“Y que ahora pudiera tener, si se confirma el triunfo del PRIAN una injerencia todavía mayor y un crecimiento de prácticas indebidas que hemos denunciado”.
Vínculos con Unión Tepito y Cártel Jalisco
Bejarano señala que se trata de un consorcio vinculado a grandes intereses económicos que desde hace tiempo se ha querido apoderar de la alcaldía.
Una parte del comercio es limpio, sano, pero otro se ha enriquecido, con trata de persona, extorsión, cobro de piso, narcomenudeo, invasión de propiedad, despojo y violencia.
Además, dice, existen grupos delincuenciales locales que tienen nexos con los nacionales, como en el caso de la Unión Tepito y el Cártel Jalisco Nueva Generación.
“Sabemos que también nosotros nos exponemos al hacer este tipo de denuncias”, dice, “porque las ejecuciones que ha habido no son imaginaciones de mi parte”.
Señala que sí teme por la seguridad de la familia, porque están enfrentando a un grupo delictivo muy poderoso, muy arraigado, las autoridades federales, estatales y de la propia alcaldía lo saben, la han venido combatiendo”.
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