Dijo que sí, pero de momento, es que no. Isabel Pantoja da largas a la invitación de Pedro Piqueras para que cierre con una entrevista el informativo que presenta en Mediaset cada noche en la edición de las nueve. La cadena ha vuelto a arrasar en los datos de audiencia de abril, mes en el que hemos consumido televisión a todas horas confinados en casa. Digo yo que Pantoja no debe ser ajena a los abrumadores datos ni al éxito del informativo de Piqueras. Según me cuentan, el problema es su estado de ánimo cambiante. Días de sí y días de no.
El presentador sorprendió a más de uno con la magnífica idea de dedicar cada noche los últimos minutos de la edición que dirige a personajes famosos del mundo de la cultura, para algunos “titiriteros”. Bendita sea esa gente que emociona con una canción, un verso, una interpretación frente a cámara, un buen papel sobre las tablas o una composición, sin ir más lejos. Piqueras va citándolos uno a uno y ofrece minutos amables al final de un espacio basado, como todos en estos tiempos duros de pandemia, en las últimas noticias de la Covid-19, sus terribles efectos y las trágicas cifras de fallecidos. Nos alegra un poco la existencia. Gracias, Pedro. El informativo se acerca a cada uno de esos nombres propios que nos cuentan cómo están viviendo estos momentos y nos invita a asistir a su charla distendida. He disfrutado con Pablo Alborán y su preciosa canción “Cuando estés aquí”, compuesta en su estudio de su casa malagueña, con fines benéficos y que habla de la pandemia, el confinamiento y los abrazos.
Me reí mucho con los actores Pepón Nieto y Juan Echanove, que hizo un guiño al “Merlos Place” (un beso, Marta). Aplaudí al sinigual Raphael que siempre es aquel y se hace notar; al atractivo actor José Coronado-Nemo Bandeira, y a la actriz Blanca Suárez que seguí en la interesantísima historia de la marquesa de Llanzol, cuyo romance con el ministro franquista Ramón Serrano Súñer, cuñado de Franco, fue todo un escándalo durante la dictadura, o a la cantante Rozalen, que siempre emociona.
Cuando leí la noticia de que Isabel Pantoja recibiría a Pedro Piqueras desde su casa para entrar en directo, por videollamada o Skype, en el informativo, me pareció no solo acertado sino necesario. Isabel ha sido en el último año uno de los rostros más seguidos en la cadena y ha dado minutos de gloria televisiva en la pasada edición de ‘Supervivientes’, la más vista de la historia del reality.
Tras más de dos años sin pisar un escenario, cantó el 6 de marzo en el madrileño Wizink Center, auditorio en el que reunió a más de 10.000 personas, siete días antes de que el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, planteara el estado de alarma. Desde entonces no sabemos nada de ella, a excepción de lo que publican los medios. Está confinada en Cantora, la finca que heredó de su marido, Francisco Rivera Paquirri, con su madre y su hermano Agustín, e imagino que dando gracias por encontrarse bien de salud después de tanta exposición en su último concierto, ella y todos los que asistieron.
Como se trataba de una simple gripe por aquel entonces en nuestro país, pues ¡hala, a ver a la Pantoja! Una semana después no nos dejaban salir de casa y se nos morían abuelos, mayores y no tanto. Imagino su miedo. Normal. La Revista ‘Diez Minutos’ publicaba esta semana en exclusiva que la cantante confecciona mascarillas cada día y las dona a la gente necesitada.
Seguida por millones de fans en España y Latinoamérica, Isabel Pantoja es siempre protagonista, tanto por lo que aporta al mundo la cultura como cantante tonadillera y otros palos, como por su vida privada, que en los últimos años se fundió con la política municipal de Marbella al mantener una relación sentimental con el exalcalde Julián Muñoz durante tres años, y ser condenada, como el resto de la corporación, por su implicación en el llamado caso Malaya. Cierto es que ha cumplido con la Justicia y vive una nueva etapa. He sido muy crítica con ella en esa etapa malaya, pero cumplió.
Buscas a Isabel Pantoja en su página web oficial y ahí están los dos conciertos que tenía programados. Esta semana, hubiera viajado a Chile sino fuera por esta pandemia que nos ha parado la vida a todos. Los días 8 y 9 de mayo los tenía reservado para cantar en Gran Arena Monticello. El 31 de julio, en el Festival Tío Pepe de Jerez. Hay previstas nuevas fechas. La vida sigue y serán en diciembre. La promoción de su última grabación “Enamórate”, parada. La artista recuperó sus maltrechas arcas el año pasado gracias al contrato millonario que firmó con Mediaset.
Su año televisivo le salvó del caos económico en el que vivía. Mucha deuda y escasos ingresos, hasta que resucitó en ‘Supervivientes’. ¡Claro que tiene una entrevista! Esta no sería remunerada, claro. Me cuentan que la preocupación por el delicado estado de salud de su madre hay días que le vence el ánimo. La cita estaba prevista, pero se retrasa. Quizá su entrada con Piqueras no debía hacerse esperar. Espero no equivocarme y que acuda.