Alexander
Isak es uno de los nombres propios de la Eurocopa, en especial tras su portentosa actuación de la segunda jornada ante Eslovaquia. Nada que no hubieran visto ya los aficionados de la Real, para los que el espigado ariete nacido en Solna en 1999 es una de las más impactantes apariciones de las últimas décadas en la historia del club txuri urdin. El de Isak no es el primer caso de un fichaje de la Real que triunfa en sus dos primeras temporadas gracias a un rendimiento o unos registros goleadores que incluso luego les llevaron a fichar por otros clubs. Karpin, Kovacevic, Kodro o Nihat forman parte de una nómina de refuerzos con los que la Real no sólo ganó deportivamente sino que obtuvo un beneficio económico -salvo con el turco- en forma de traspaso. Lo que, puesto en contexto, hace más impactante el caso de Isak es su insultante juventud. El sueco cumplirá en septiembre 22 años y a su corta edad ya se ha apuntado 33 goles en 89 partidos con la Real lo que, desde no pocos puntos de vista, supone todo un récord en la historia del club.
Isak, de hecho, es el segundo jugador en la historia moderna del club que alcanza esa cifra de goles a tan temprana edad. La cifra global (33) le sitúa lejos todavía de incrustarse entre los mejores anotadores de la historia del club pero el haberlo hecho cuando todavía no ha soplado 22 velas supone un prodigio de precocidad. Entre los mejores ‘killers’ txuri urdin sólo Roberto
López
Ufarte, dueño de algunos de los mejores registros de precocidad en la Real, sumaba ya 33 dianas antes de los 21 años. Las marcó cuando todavía tenía 20 aunque necesitó algún partido más (104) que Isak para conseguirlo. Oros grandes anotadores blanquiazules como Satrustegui, Griezmann o Bakero sumaron su gol 33 con 22 años, mientras que Vela, Uralde, Kovacevic o Nihat, futbolistas que sin duda dejaron su firma en forma de incontables goles, tenían 24 años cuando llegaron a la cifra que atesora Isak tras sólo dos temporadas como txuri urdin.
Más difícil tiene superar el sueco, en términos de promedio, la voracidad de un John
Aldridge que apenas necesitó 69 partidos para llegar a los 33 tantos. El irlandés, entre los grandes goleadores de la historia moderna del club, es el que más rápido los alcanzó, seguido de, curiosamente, Willian
José (69 partidos), Nihat
Kahveci (73), Meho
Kodro (77) y Darko
Kovacevic (79). Hablamos de cuatro de los cinco mejores goleadores en la historia de la Real por lo que el hecho de que Isak sea el sexto que menos partidos ha necesitado para llegar a 33 goles (89) y que lo haya hecho con 21 años le sitúa en la senda de, si decide continuar en Donostia, hacer historia en la real.
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