Italia y Argentina, dos selecciones en estado creciente, se medirán en el Eden Park de Auckland este lunes a las 18:00 (hora local). El resto de las selecciones del grupo G ya están en la clasificación actualizada al momento de los partidos, y las italianas estarían en tercera posición.
Las azzurre cuentan con una plantilla de jugadoras que militan en la liga italiana. Absolutamente todas excepto Giulia Dragoni, que desde el 31 de enero juega en el Barça. Las principales jugadoras fichadas son de la Juventus, la Roma, y otros equipos de 1a división italiana.
Este Mundial sería el último de Estefanía Banini, que se retirará del fútbol, igual que Rapinoe, cuando termine esta temporada. No serán las únicas, pues la holandesa Stef Van Der Gragt, también colgará las botas tras el Mundial.
Italia tiene en sus filas para la cita mundialista el tesoro más valioso: la juventud y el talento de Dragoni, la ex futbolista de la AS Roma que terminó haciendo historia en La Masia del club.
La Argentina de Germán Portanova disputará el torneo por cuarta vez, y buscará la primera victoria de su historia en un mundial. Su sueño está en clasificarse para los octavos de final. Pese a estar en el grupo más equilibrado y por tanto, también el más difícil, la AFA confía en la selección.
“Argentina, hagamos historia” reclama el espot televisivo previo al debut que ha creado la organización y que es narrado por la legendaria jugadora Vanina Correa.
Germán Portanova tiene claro cómo quiere que juegue Argentina. Señaló que Francia 2019, la selección, comenzara los partidos atrás, esperando los ataques de las rivales.
En cambio, ahora buscará jugar a su manera, con la que consiguieron quedar como 3r mejor equipo de América. Saldrán a presionar con agresividad, con unos automatismos determinados, saliendo con el balón en los pies.