Se trata de una Finalissima que vale una estrella. Dos gigantes que atraviesan realidades opuestas se encuentran en Wembley soñando con ganarla. Argentina y Lionel Messi llegan como campeones de América, soñando con realizar un gran Mundial. Italia, ganadora de la Eurocopa, todavía no entiende cómo deberá mirar desde afuera todo lo que suceda en Qatar.
Habrá un escenario ideal, el imponente Wembley. Los organizadores aseguran que el estadio se llenará cuando a las 20.45 de España la pelota empiece a rodar, en una propuesta que en caso de empate propone definición por penaltis.
Esta Finalissima que acordaron la Conmebol y la UEFA fue recibida como una gran noticia por Lionel Scaloni. El seleccionador argentino requería cruces con europeos antes del Mundial para sacar las últimas conclusiones.
Nada mejor que este partido con una estrella como excusa. Así lo entiende el entrenador: aunque no confirmó la formación y dijo que tiene algunas dudas, apelaría a los 11 ideales. Sólo le falta Leandro Paredes, quien recorre el último tramo de recuperación de una lesión muscular. Su espacio lo ocupará Guido Rodríguez.
A Italia aún le duele el impacto que recibió en marzo ante Macedonia del Norte, ese 0-1 que lo dejó por segunda vez consecutiva sin Mundial. Tratará que el de hoy en Londres sea el primer paso de una historia con final feliz. Y no será un partido más. Representará la despedida del inmenso capitán Giorgio Chiellini, quien escogió esta Finalissima para retirarse de la ‘Azzurra’.
Más allá de haberse liberado ganando la Copa América, Argentina desembarca en Wembley ostentando un invicto de 31 partidos. Es la selección que lleva más tiempo sin perder. Más allá de ese matiz estadístico, intentará subir su nivel contra Italia. En sus últimos encuentros clasificatorios para el Mundial, la albiceleste había bajado su nivel.
Roberto Mancini tampoco se guarda nada. Apela a sus mejores piezas, dentro de lo que puede. Es que carga con algunas bajas pesadas: a las ya anunciadas de Federico Chiesa y Ciro Immobile se sumaron en los últimos días Nicolò Zaniolo, Moise Kean y Marco Verratti.
Messi, fresco e ilusionado
A Messi en los días previos en Bilbao se lo observó fresco, ilusionado, con ganas. Se lo nota feliz en esta nueva Selección que al fin supo cómo rodearlo. La aventura que se le viene en Qatar lo revoluciona. ¿Leo podrá llevar de la mano a Argentina en este clásico de gigantes? ¿Hasta dónde Italia habrá superado su duelo por la eliminación mundialista? Todo lo contestará esta Finalissima que vale una estrella.
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