Juan José Barea alargará su trayectoria en la NBA al menos una temporada más después de renovar por un año y 2,6 millones de dólares con un contrato mínimo de veterano. El base puertorriqueño arrancará así su duodécima temporada con los Dallas Mavericks, donde ha pasado la mayor parte de sus 15 años en la liga.
El jugador puertorriqueño, de 36 años, tiene una muy buena relación con Luka Doncic y sufrió para recuperar el ritmo de juego el curso pasado al volver de una lesión en el talón de Aquiles. En la temporada de la pandemia, Barea promedió 7,7 puntos y 3,9 asistencias en 15 minutos de juego en tan solo 29 partidos.
Los Mavs llegarán al campo de entrenamiento con 16 jugadores bajo nómina, uno más de los que permite la liga en la plantilla. Su plan es que los nombres secundarios batallen por el último puesto en el banquillo de Rick Carlisle.
“J.J. me ha ayudado mucho. La verdad que, cuando vine a Dallas, siempre se ha acercado y me ha hablado mucho”, decía Doncic el curso pasado sobre su relación con el base. “Me gusta pasar tiempo con él, es alguien con quien siempre puedo estar hablando de baloncesto o de otras cosas de la vida”.
Barea, que se planteó continuar su carrera deportiva en España si las cosas se torcían en la NBA, pretende seguir vinculado a la competición como entrenador una vez retirado. En 2011, el puertorriqueño fue una pieza fundamental en el único anillo de Dallas, una ciudad que le tiene mucho cariño.
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