La NBA anunció anoche que el premio al Ejecutivo del Año en la liga se lo había llevado James Jones, de los Phoenix Suns. El ex-jugador logra el galardón tras una fantástica planificación de temporada que ha llegado al equipo a las Finales del Oeste.
Desde que asumió el cargo, Jones ha asignado a Monty Williams como entrenador, ha sido el artífice de fichajes como Chris Paul o Jae Crowder y ha convertido a los Suns en un equipo candidato al título.
Probablemente el movimiento de CP3 sea el más importante de estos. Desde que se retiró, ha ido labrándose su camino en las oficinas poco a poco hasta convertirse en el GM de Phoenix.
Hacerse con Paul trajo muchas críticas al principio pero los resultados han demostrado que era el movimiento correcto. El base ha convertido a Phoenix en un gran equipo, cuajando su mejor temporada en más de una década y con ventaja en las WCF.
Dennis Lindsey, de los Jazz, quedó segundo en la votación a pocos votos de Jones. Sean Marks (Nets) y Leon Rose (Knicks) también recibieron votos para un galardón que se terminó llevando Jones de forma merecida.
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