El entrenador del Barça, Sarunas Jasikevicius, confesó este viernes tras vencer al Baskonia en la recta final, que no sabía cómo habían ganado y señaló que lo que ocurrió en el Buesa Arena con la remontada de su equipo gracias a un parcial final de 0-11 “pasa pocas veces”.
El lituano explicó que se les puso “el partido cuesta arriba” y lamentó que no jugaron su baloncesto en el tercer y último cuarto. “Tuvimos muchas dudas cuando Baskonia comenzó a jugar mejor”, apuntó el técnico culé, que celebró “ganar con malos porcentajes en el triple y con tantas pérdidas”.
Jasikevicius destacó que puso en la pista el quinteto más ofensivo que tiene porque tenían que anotar, una decisión que le dio resultado.
Por su parte, el entrenador del TD Systems Baskonia, Dusko Ivanovic, señaló tras la derrota de su equipo que demostraron que “lo imposible es posible”, después de tener la victoria en la mano ante el Barça. El técnico montenegrino se mostró satisfecho por el carácter de su equipo para recuperar el mando del partido, pero subrayó que en las tres últimas defensas culés no tuvieron la agresividad que tuvieron anteriormente y no aprovecharon que su rival estuviera en bonus para sumar desde el tiro libre.
“El baloncesto es bonito por esto, parece que está todo acabado pero no lo está”, dijo Ivanovic, que reafirmó que intentarán demostrar que lo imposible es posible pero de manera positiva.
“Estoy muy cabreado pero ahora no podemos hacer nada”, dijo con una sonrisa y pensó en el próximo partido ante el Herbalife Gran Canaria, que está en el aire por un caso de coronavirus en el conjunto insular.
A pesar de la derrota, Dusko Ivanovic remarcó que jugaron por momentos “una defensa excelente” que les permitió obtener una ventaja de diez puntos en la recta final.
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