Jeremy Sochan no es un jugador cualquiera. El alero de 19 años, el debutante más joven como titular de los San Antonio Spurs, es todo un personaje dentro y fuera de la pista, como bien atestigua su gusto por los peinados coloridos y estrambóticos. ¿Quizás un pequeño recuerdo o guiño a Dennis Rodman, otro ilustre de la franquicia texana? El novato de la escuela de baloncesto avanzado de Gregg Popovich es uno de los proyectos más prometedores y escrutados de la actual temporada en la NBA.
Más allá de su potencial, su nombre ha destacado por la decisión de empezar a lanzar tiros libres a una mano. Una rareza que, sin embargo, está dando sus frutos. En sus primeros 23 partidos como profesional, Sochan firmó un pobre 11 de 24 desde la línea de personal (45,8%). Y entonces, pam, la imagen viral y la anécdota que le presentó al gran público: este tiro libre a una mano.
¿Por qué se decidieron por esta solución radical? “Cuando lanzo con una mano, mi codo está dentro [bien colocado]. Cuando uso la mano de guía, mi codo se sale de posición. Así que estamos intentando poner énfasis en ese movimiento”, contesta el jugador. El resultado es sorprendente: desde que fue el protagonista anecdótico de la jornada el pasado 20 de diciembre, Sochan ha incrementado su acierto de forma notable.
Lanzando a una mano presenta una serie de 29 dianas en 37 intentos (78,4%) en un total de 15 partidos. “La cosa va bien, es un proceso largo. Confío en ello y en la gente que me rodea y que cree en ello. Trabajo duro para mejorar”, comentaba hace unos días sobre sus sensaciones con la nueva rutina y el plan de trabajo que tiene por delante.
El alero, de 2,03 m y 104 kg, es un portento defensivo que fue elegido en el número 9 del Draft de la NBA 2022 por los San Antonio Spurs. De padre estadounidense y madre polaca, se formó primero en Inglaterra y luego volvió a Estados Unidos durante su época de instituto. De él dicen que es un jugador ideal para la NBA contemporánea, una nueva versión de Draymond Green. “Mucha gente puede quedarse en lo del cabello, pero si le conoces todo esto es una expresión de arte, cultura y moda, algo muy importante para él”, contaba John Jakus, técnico asistente durante su etapa universitaria, a The Athletic. “Es el típico tío que puede vivir en el Tibet durante sies meses”, añadía.
Aunque su potencial ofensivo está todavía por desarrollar, en San Antonio su personalidad ya ha calado y puede resultar clave en medio de la actual reconstrucción del equipo. A día de hoy, Sochan promedia 8,8 puntos, 4,8 rebotes y 2,4 asistencias por encuentro 25,7 minutos de juego. Como decía el otro día Austin Rivers, su verdadero impacto no reside en la estadística sino en las cosas pequeñas. Por poner un ejemplo, contra Luka Doncic hizo trabajar al esloveno en defensa y logró anotar 20 puntos en 12 tiros. Eso sí, la estrella le contestó con 51 puntos, y es que sus puntos fuertes no borran el hecho de que todavía está muy verde.
La capacidad de recurrir al tiro libre de una mano, para otros una humillación, habla muy bien del carácter y actitud de un jugador que en el futuro puede dar mucho que hablar. De él, Pop ha dicho que le ve como un “mini-Rodman”, un elogio que no está nada mal. De momento, a su manera, ha dado un paso al frente importante para mejorar.