Por fin ha llegado el día con el que Kiko Rivera llevaba 5 años ‘soñando’, el del regreso de su ex, Jessica Bueno, a España. Una nueva mudanza con la que el hijo de Isabel Pantoja podrá estar un poquito más cerca de su hijo mayor, Francisco. El marido de Bueno, el futbolista Jota Peleteiro, ha fichado por un club español tras pasar un lustro en Reino Unido, lo que ha provocado una mudanza con la que todos están encantados.
«Viaje en familia a un nuevo destino», ha anunciado la sevillana en su cuenta de Instagram junto a varias fotografías en las que se la puede ver en un avión junto a su marido y sus dos hijos. «Nueva vida, nuevas aventuras, nuevas ilusiones. Volvemos al norte y no podemos sentirnos más felices🥰», sentencia.
Jota se ha convertido en el nuevo jugador del Deportivo Alavés, convirtiendo la ciudad vasca de Vitoria en su nuevo hogar. No solo van a estar más cerca de Sevilla, de donde es Jessica y donde vive Kiko junto a su mujer, Irene Rosales, y sus dos hijas, Ana y Carlota, sino también de La Coruña, de donde es el futbolista.
De momento, Rivera no se ha pronunciado al respecto y es que lleva con mucha discreción todo lo que tiene que ver con su primogénito y su relación con Jessica Bueno. Si bien ahora la expareja se lleva bien por el pequeño que tienen en común, hace unos años se vieron las caras en los tribunales pues al hijo de Isabel Pantoja no le parecía bien que la modelo se mudara con el pequeño a Éibar. Finalmente, el juez decidió que fuera Bueno quien se quedara con la custodia del niño y que Kiko le vería un fin de semana cada quince días. Un plan que sigue vigente a día de hoy y que ahora será mucho más fácil de cumplir.
Sin duda, que el pequeño resida ya en España es la mejor noticia para Kiko Rivera, a quien el 2020 no le ha dado muchas alegrías. Se ha reconciliado con su hermana, Isa Pantoja, sí, pero hace unos meses vivió un duro golpe tras el fallecimiento de su suegra. Por si fuera poco, la llegada del coronavirus y del confinamiento el dj se quedó sin bolos, provocándole una situación laboral complicada de la que ya está saliendo. Muchos problemas, sí, pero estos ya han quedado atrás con el feliz acercamiento del pequeño Francisco.