La seleccionadora estadounidense de fútbol, Jill Ellis, se mostró “orgullosa” de las 23 jugadoras que este domingo ganaron en Lyon el Mundial de fútbol femenino, gracias a su triunfo (2-0) ante el combinado de Holanda.
En una rueda de prensa celebrada tras la final, Jill Ellis remarcó que el nivel de las rivales “ha crecido de manera exponencial” en los cuatro últimos años, “especialmente en Europa por la gran inversión realizada por parte de los clubes masculinos”, y aseguró que revalidar el título conseguido en Canadá en 2015 fue “un verdadero reto”.
“Las jugadoras de los Estados Unidos ganaron a un equipo de clase mundial, a las vigentes campeonas de Europa”, subrayó Ellis.
Preguntada por la acción del penalti de la neerlandesa Stefanie van der Gragt sobre Alex Morgan, la entrenadora inglesa explicó que no la vio en el monitor de la televisión, pero indicó que “si el trofeo vuelve a Estados Unidos es porque las jugadoras han hecho un torneo magnífico”. Sus pupilas ganaron sus siete compromisos. En la final, por 2-0, con tantos de Megan Rapinoe y Rose Lavelle.
Con ese resultado, Jill Ellis entró en la historia de la competición al emular al italiano Vittorio Pozzo, campeón del mundo como seleccionador en dos ediciones consecutivas, en 1934 y 1938.
La seleccionadora estadounidense atribuyó esta gesta a sus jugadoras y a “todos los miembros del cuerpo técnico” y reiteró su “orgullo” por poder dirigir a un grupo “extraordinario de personas”.
“Yo nunca me he fijado en lo que decían de mí”, respondió al ser cuestionada por las críticas recibidas tras la eliminación en los cuartos de final de los Juegos Olímpicos de Río 2016.
“Sí tuve claro que nos tocaba reconstruir el equipo. Teníamos que evolucionar, ser capaces de hacer más cosas porque el juego evoluciona. Aquello fue duro, pero tomamos las decisiones adecuadas para llegar hasta este punto. Teníamos confianza en las jugadoras. Yo no voy a hablar de los críticos”, apuntó antes de que su teléfono empezara a sonar en mitad de su exposición.
“Creo que es mi madre. ¡Sí, es mi madre! Perdonadme, por favor”, dijo enseñando su móvil entre las risas de la sala.
Aunque su continuidad como seleccionadora no está garantizada, Jill Ellis recalcó que quiere “disfrutar este momento”.
“No pienso en lo que hay ante mí. Quiero celebrar esto con mis jugadoras”, agregó.
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