El serbio sigue celebrando el anillo pegándose un buen fiestón en su pueblo natal, Sombor
Jokic, disfrutando a lo grande en su pueblo
A Nikola Jokic le gusta pasar desapercibido. Que le dejen tranquilo con sus caballos y sus cosas. Pero cuando se trata de fiesta, el recientemente proclamado campeón de la NBA lo da todo.
Después del fiestón que se pegó en Las Vegas, al MVP de las Finales se le vio marcándose unos buenos bailoteos encima de una silla en Sombor, su pueblo natal en Serbia, a 150 kilómetros de Belgrado.
Y es que cuando Jokic va a su tierra no duda en dejarse ir, más tranquilo también sin el foco mediático de Estados Unidos encima. A pesar del glamour de la noche de ciudades como Las Vegas, el ‘Joker’ también lo tiene claro como demostró una vez más: ninguna fiesta como las de tu pueblo.
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