“Ha sido un gran partido, la gente ha disfrutado y estamos muy contentas por el resultado porque nos abre las puertas de pasar a la final pero queda otro partido, en su campo, donde ellas ya ganaron 4-0 al Chelsea o 6-0 al Bayern, y la eliminatoria no está resuelta aunque sí encarrilada”. De esta forma, el técnico del Barça, Jonatan Giráldez, resumió sus sensaciones tras la exhibición azulgrana que acerca al equipo a Turín y la fiesta vivida en el Camp Nou con otro récord mundial de asistencia a un partido de fútbol femenino.
El técnico vigués, que reconoció que “seguramente son los mejores primeros 45 minutos que he vivido por el nivel del rival y el partido que era”, también apuntó que “una de las claves era salir bien para enchufar a la gente, porque si a nivel de juego y de actitud dábamos la mejor versión, la gente nos ayudaría a empujar y las tres ocasiones claras en 5 minutos nos han ayudado y esto también afecta al rival”. Sobre el récord, explicó que “ha sido brutal, me encanta competir y era un reto intentar batir este récord y el ambiente ha sido inmejorable”.
Giráldez apuntó que “sabíamos sus virtudes y defectos y que arrastrando a sus defensas, nos ayudaría a jugadoras de segunda línea, como Crnogorcevic que ha tenido profundidades y ha hecho un trabajo para lo que necesitaba el equipo” y no dudó en destacar la “superioridad con y sin pelota”.
Pese a las palabras del técnico rival, que dijo que “no es realista” pensar el poder remontar la eliminatoria, Giráldez afirmó que esto “no cambia nuestra preparación para la vuelta y haremos lo mismo, trabajar para potenciar lo que hemos hecho bien y mejorar también cosas. Si cree que ya podemos comprar los billetes para la final, para nosotras quedan 90 minutos y queremos ir a Alemania también a ganar”.