SAN DIEGO, California – En Tijuana, los viajeros que cruzan a diario la frontera reaccionaron ante la decisión de una corte federal de Boston, en Massachusetts, para impedir que agentes revisen celulares y computadoras portátiles sin una orden judicial.
Una jueza consideró que es una violación hacia los derechos de la Cuarta Enmienda de la Constitución, que protege a los estadounidenses contra búsquedas y decomisos que carecen de una orden.
Los denunciantes son 10 ciudadanos estadounidenses y un residente legal permanente, musulmanes o pertenecientes a minorías, a los que se les han hecho búsquedas en la aduanas de EEUU al menos una vez, la mayoría en aeropuertos del país tras un vuelo internacional.
La Unión de Libertades Civiles de EEUU (ACLU, por sus siglas en inglés), uno de los entes que representaron a los denunciantes, ha considerado la decisión una “victoria para los derechos a la privacidad”, ya que los agentes fronterizos “deben ahora demostrar que tienen una sospecha individualizada de contrabando”, según indicó en un comunicado.
ACLU señala que las búsquedas en dispositivos electrónicos en los puertos de entrada de EEUU se ha incrementado y una de las dos agencias responsables, la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP) – la otra es el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) -, realizó 33,000 búsquedas en 2018, cifra que casi cuadruplica la de 2015.
Viajeros en la garita del cruce de San Ysidro dijeron a Telemundo 20 que experimentaron la impotencia de ver como los agentes revisaron cada mensaje de su celular.
Una revisión a la que sometieron a un usuario sólo hace un mes en la garita peatonal de PedWest.
“Como mexicano te sientes como oprimido, que no puedes hacer nada y te tienen ahí detenido como si fueras un delincuente”, dijo un usuario en la garita de San Ysidro, Emilio León. “Y me quitó mi celular por una hora y media, checaron todo mi whatsapp, mis fotos, todo eso”.
El viajero aseguró que esto ocurrió mientras cruzaba la frontera para ir a una fiesta en San Bernardino.
Usuarios dijeron que al obtener información del teléfono celular, esta se puede salir de contexto.
“O que de repente vayan a malinterpretar cosas cuando uno solo va a comprar al otro lado”, dijo Omar Vázquez, usuario en la garita de San Ysidro.
Algunos usuarios dijeron seguir en alerta, a pesar de la decisión de la corte.
“Yo lo veo como una intimidación hacia tu privacidad”, dijo Vázquez.
Mientras que expertos dijeron que es una situación entendible en la frontera y que se deben tomar ciertas precauciones al cruzar.
“Muy difícil hablar con el gobierno”, dijo Nora Benavides, directora del programa de libre expresión Pen. “Deben saber como cambiar sus passwords en sus teléfonos”.
León dijo que continúa tomando precauciones.
“Con ellos nunca se sabe, mejor yo sigo borrando sin quitar lo necesario, porque no sabes con ellos que va a pasar”, dijo León. “A un motociclista lo van a ver como pandilla siempre”.
León dijo que por ser motociclista siente que es un blanco perfecto.
Para los expertos, los periodistas y activistas también son un blanco.
“Creo que es peor para abogados, activistas que quieren hablar sobre la situación, sobre migrantes”, dijo Benavidez.
Algunos residentes de la región dijeron esperan que los agentes utilicen mejor las herramientas que ya tienen.
“Se supone que ellos tienen toda tu información de ti, a que te dedicas, tu profesión, te dieron tu visa entonces ellos saben, es más saben hasta tu Facebook”, dijo Vázquez.
De acuerdo a los nuevos lineamientos, los agentes también podrán acceder a los teléfonos y computadoras portátiles al demostrar que el usuario en la frontera es sospechoso de contrabando.