El juicio por conducta sexual inapropiada de Mario Batali se reanuda el martes en Boston, donde se espera que tome el estrado en su propia defensa.
El juicio por conducta sexual inapropiada de Batali comenzó el lunes en el Tribunal Municipal de Boston con su acusadora contando cómo había estado “conmocionada, sorprendida y alarmada” cuando el famoso chef la besó y manoseó agresivamente mientras se tomaba selfies en un restaurante en 2017.
La trabajadora de una empresa de software del área de Boston de 32 años dijo que se sentía confundida e impotente para hacer algo para detener a Batali.
“Todo estaba sucediendo tan rápido y estaba sucediendo esencialmente todo el tiempo”, testificó la mujer en el juicio. “Solo mucho contacto”.
El juicio comenzó el lunes después de que Batali, en un movimiento sorpresivo, renunció a su derecho a un juicio con jurado y optó por que un juez decidiera su destino.
La mujer también testificó que se sintió avergonzada por el incidente de 2017, hasta que vio a otras mujeres dar un paso al frente para compartir encuentros similares con Batali.
El abogado de Batali, Anthony Fuller, argumentó que el asalto nunca ocurrió y que la acusadora no es un testigo creíble y tiene un incentivo financiero para mentir.
También sugirió que ella bromeó sobre su encuentro en mensajes de texto con amigos y comió en Eataly, el mercado italiano que alguna vez fue propiedad de Batali, después del encuentro.
Batali se declaró no culpable de un cargo de agresión indecente y agresión en 2019, derivado de las acusaciones de que besó y manoseó a la fuerza a una mujer después de tomarse una selfie con ella en un restaurante de Boston en 2017.
Si llegara a ser declarado culpable, Batali podría enfrentar hasta dos años y medio de cárcel y se le solicitará que se registre como delincuente sexual. Se espera que esté en la corte durante todo el proceso, que debería durar unos dos días una vez que se complete la selección del jurado, dijo la oficina del fiscal de distrito del condado de Suffolk, Kevin Hayden.
Los abogados de Batali no hicieron comentarios antes del inicio de la selección del jurado el lunes en el Tribunal Municipal de Boston. Los abogados del chef dijeron anteriormente que el cargo no tiene fundamento.
La acusadora también presentó una demanda civil contra Batali en busca de daños no especificados por “angustia emocional severa” que aún está pendiente en el Tribunal Superior del Condado de Suffolk en Boston. Su abogado no respondió a los correos electrónicos el viernes.
PREVIAS ACUSACIONES DE MANOSEO INAPROPIADO
Batali se encuentra entre una serie de hombres de alto perfil que se han enfrentado a un juicio público durante el movimiento social #MeToo contra el abuso y el acoso sexual en los últimos años.
El hombre de 61 años fue una vez un presentador fijo de Food Network en programas como “Molto Mario” y “Iron Chef America”. Pero la carrera de alto vuelo de la personalidad se derrumbó en medio de acusaciones de conducta sexual inapropiada.
Cuatro mujeres lo acusaron de tocarlas inapropiadamente en 2017, después de lo cual renunció a las operaciones diarias en su imperio de restaurantes y dejó el programa de cocina de ABC “The Chew”.
Batali ha ofrecido una disculpa, reconociendo que las acusaciones “coinciden” con las formas en que ha actuado.
“Cometí muchos errores y lamento mucho haber decepcionado a mis amigos, mi familia, mis fanáticos y mi equipo”, dijo en un boletín electrónico en ese momento. “Mi comportamiento estuvo mal y no hay excusas. Asumo toda la responsabilidad”.
ACUERDO DE $600,000 TRAS INVESTIGACIÓN EN NUEVA YORK
El año pasado, Batali, su socio comercial y su empresa de restaurantes en la ciudad de Nueva York acordaron pagar $600,000 para resolver una investigación de cuatro años realizada por la oficina del fiscal general de Nueva York sobre acusaciones de que Batali, los gerentes de restaurantes y otros trabajadores acosaron sexualmente a los empleados.
En Boston, abrió una sucursal del popular mercado de comida italiana Eataly en el centro de Prudential Center en 2016, así como una Babbo Pizzeria e Enoteca en el Seaport District de la ciudad en 2015.
Desde entonces, Batali ha sido comprado de su participación en Eataly, que todavía tiene docenas de ubicaciones en todo el mundo, incluso en Boston, y el restaurante Babbo en la ciudad cerró desde entonces.
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