Paulo Dybala será hoy el gran protagonista del Juventus-Roma. Un clásico marcado por el regreso del mediapunta argentino a la que ha sido su casa en las últimas siete temporadas. La ‘Joya’ se reencuentra con la afición ‘bianconera’ tras no renovar y echarse a los brazos de un José Mourinho que le ha convencido para liderar su ambicioso proyecto.
Dybala, aclamado por 10.000 enfervorizados ‘tifosi’ de la Roma en su presentación en el Colosseo Quadrato de la capital italiana, confesó ayer en un post en Instagram que “será un partido lleno de emociones: ¡volver a una ciudad donde tengo tantos amigos y jugar en un estadio donde he vivido buenos momentos y compartí trofeos con los aficionados de la Juventus que me han hecho sentir como en casa!”.
El aviso de Dybala
Pero Dybala lo hará esta vez como rival y avisa. “Daré lo mejor de mí para hacer feliz a los aficionados ‘giallorossi’, extraordinarios y llenos de pasión por el fútbol, que me han acogido muy bien desde el primer día. Lo bonito del fútbol también es todo eso junto y por eso quiero disfrutar del partido. Estoy convencido de que será un gran espectáculo… y lo daré todo para ganar”
La Roma, tras ganar por un 1-0 a Salernitana y Cremonese, afronta su primer gran test de la temporada. Visita a una Juventus sin Pogba, Di María y Bonucci, lesionados, y con dudas al empatar en la segunda jornada contra la Sampdoria (0-0).
Sin Wijnaldum hasta enero
Por su parte, Mourinho no puede contar con Zaniolo ni Wijnaldum, El medio neerlandés, que el domingo se fracturó la tibia derecha en el entrenamiento, seguirá un tratamiento conservador y no se operará. La Roma espera que vuelva a jugar en enero, por lo que se perderá el Mundial
