Los Angeles Clippers extendieron anoche su racha de victorias con un sólido triunfo ante New York Knicks por 129 a 115. El encuentro tuvo a Kawhi Leonard como claro protagonista, dominando a su antojo en ambos lados de la cancha y procurando una victoria más para los angelinos, que siguen líderes de conferencia.
Para los Clippers la de anoche fue su máxima anotación del curso, justamente ante una de las mejores defensas de toda la liga. El triunfo, el décimo en sus últimos once encuentros, confirma el gran estado de forma de los de Ty Lue en la competición.
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Leonard volvió a resultar imparable para los rivales, terminando con 28 tantos y un diferencial en cancha de +19, el más alto de todo el partido de largo. Su efectividad y sus recursos le permitieron liderar al equipo cuando el partido se puso tosco y sacar adelanta un triunfo más de los angelinos.
No obstante, Kawhi no estuvo solo. El quinteto titular al completo le acompañó, todos por encima de los 13 puntos y aportando minutos de calidad pese a una rotación larga por parte de Lue. Los 18 de Reggie Jackson, los 15 de Serge Ibaka o los 17 de Paul George ayudaron a la estrella en su cometido.
Los Knicks aguantaron como pudieron, valientes y sin resignarse ante un rival claramente superior. Julius Randle volvió a demostrar todo su talento, anotando 27 tantos y sumando 12 capturas, pero no fue suficiente para poder competir el partido.
Volvió a destacar el base novato de los de la Gran Manzana, Quickley. El joven jugador se fue hasta los 25 puntos en apenas 27 minutos, otra gran noche en su estreno en la mejor liga del mundo. Los de Thibodeau volvieron a practicar un baloncesto duro y físico, pero los Clippers demostraron estar un peldaño por encima.
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Con este triunfo los angelinos mejoran su marca personal a 16-5, mientras que los neoyorkinos bajan hasta un 9-12 que les condena a la zona media de la tabla en la Conferencia Oeste. Ambos conjuntos están jugando por encima de lo esperado de ellos y darán mucho que hablar este año.
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