El entrenador de los Warriors de Golden State, Steve Kerr, y sus jugadores, el alero Kevin Durant, y el base Stephen Curry, reconocieron al concluir el tercer partido de la eliminatoria de semifinales de la Conferencia Oeste, que perdieron en la prórroga por 126-121 ante los Rockets de Houston, que la gran defensa que jugó el alero PJ Tucker fue la clave de la victoria del equipo tejano.
“Todo el equipo de los Rockets nos superó, pero Tucker hizo una gran labor defensiva y eso impidió que nosotros no pudiésemos anotar las canastas que necesitábamos en los momentos decisivos del partido”, declaró Kerr. “Además algunos jugadores nuestros, como Curry, no tuvieron su mejor inspiración”.
A pesar de la derrota, que puso la serie con ventaja de los Warriors por 2-1, Kerr dijo que su equipo tuvo oportunidades de haber conseguido la victoria, pero hubiese sido un “robo” porque los Rockets había sido mejores.
“Nos dominaron en todas las facetas del juego, especialmente bajo los aros con 20 rebotes, y si en la recta final luchamos con opciones al triunfo fue porque Kevin Durant tuvo una actuación brillante, lo mismo que Draymond Green”, admitió Kerr. “Durant estuvo imparable y ninguna defensa puede con sus tiros”. añadió.
Durant, que fue el líder encestador de los Warriors con 46 puntos, dijo que no le preocupaban las estadísticas y que el jugador clave de su equipo en el partido fue Green, quien no sólo aportó un triple sino que mantuvo una concentración especial en el juego.
Mientras, Curry, que acabó con 17 tantos pero falló 16 de 23 tiros de campo, incluidos siete de nueve intentos de triples, y varias penetraciones fáciles, admitió que no sabía los motivos por los que no había tenido su mejor rendimiento.
“Se trata de esas noches en las que no te salen las cosas como las deseas, aunque comencé el partido bien, con agresividad, y buena colocación en el campo para hacer tiros a canasta”, explicó Kerr.
“Pero los 44 minutos que jugué no fueron los mejores, aunque el equipo sí lo hizo y tuvimos opción de luchar por el triunfo”.
En cuanto al posible efecto negativo en su juego de la ligera dislocación que sufrió en el primer partido de su dedo mediano de la mano izquierda, Curry dijo que para nada tenía que ser ninguna excusa.
“Si estoy en el campo es para jugar y hacer tiros”, destacó Curry. “Mi responsabilidad es la de producir en el juego ofensivo y esta noche no lo hice”.
“El cuarto partido va a ser una nueva oportunidad para que cada uno, sin importar si es titular o reserva pueda hacer la mejor aportación y al final del día lo único que cuenta es que el equipo haya conseguido la victoria”, subrayó Curry. “Ese es el objetivo y el punto de concentración que tendremos que tener todos los jugadores”.
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