El ambiente del Pireo anoche iba a ser infernal. Lo sabían los griegos, lo sabía el Monaco que se preparó lo mejor que pudo para aislarse de las distracciones y lo sabíamos los aficionados de la Euroliga.
Quizás, no obstante, pilló por sorpresa a Kevin Durant. La estrella de los Brooklyn Nets y vigente campeón olímpico con Estados Unidos fue un espectador de lujo en el encuentro que enfrentó al Olympiacos con los monegascos.
Sin embargo, Durant recibió unos sonoros abucheos que puede que le hagan replantearse asistir a más partidos en territorio griego durante el futuro próximo.
Durant destacó por encima de todo el ambiente infernal que hubo antes del encuentro y también durante la celebración del mismo, con las bengalas como protagonistas y los cánticos de la afición local.
Preguntado más tarde por Twitter por la comparación entre los aficionados griegos y los americanos, KD bromeó diciendo que si un espectador sacase una bengala en un encuentro de la NBA probablemente acabaría e Rikers (prisión de NYC).