Coge color y forma el Barcelona de Koeman con el paso de los partidos, solvente contra los rivales de menor calado. Para su infortunio, sin embargo, su última derrota fue en la final de la Supercopa y descontó un título que se le puso de cara con la eliminación previa del Madrid. Pero el Athletic -rival de este domingo a las 21.00 horas- le venció y el Barça deshojó parte de una margarita que no pinta bien: en Liga esta ya a 10 puntos del Atlético (cuenta con un partido menos) y en Champions le espera el PSG (la ida de los octavos es el 16 de febrero). En la Copa le espera el Granada (los cuartos se juegan este miércoles), equipo ante el que han perdido Real Madrid y Atlético.
“Es una temporada en la que estamos cambiando cosas, hay muchos jugadores jóvenes. Intentamos mejorar, pero hay que ser realista y ver de dónde venimos. Esto no es cosa de un solo jugador. El Barça no está para ganar muchas cosas”, resolvió Ronald Koeman, al fin pesimista porque el club no puede ni quiere afrontar sus peticiones en el mercado.
En verano Koeman pidió por activa y por pasiva la incorporación de un central (Eric García, del City) y de un delantero (Memphis Depay, del Lyon). No ha llegado ni lo uno ni lo otro: el dinero en el club es escaso. También ha sido el club poco hábil en las negociaciones porque de tanto esperar para sellar el acuerdo con el central citizen, se le echaron las horas encima. Ahora, a falta de dos días para el cierre del mercado de invierno, uno de los tres candidatos a la presidencia del Barça (Víctor Font), selló el acuerdo con el City para traerlo por 230.000 euros. El jugador renuncia a su salario y se empezaría a abonar el precio del fichaje el próximo año, pero los otros dos candidatos (Joan Laporta y Toni Freixa) decidieron que es mejor no gastar teniendo en cuenta que la próxima temporada llegará a coste cero. “No es mi trabajo saber si vendrá o no. No me interesa. Aunque seguramente vendrá la temporada que viene. Por lo que si no es posible en enero, aceptamos y seguimos hacia delante”, resumió, lacónico y sin querer meterse en berenjenal alguno.
Y eso que se le buscó las cosquillas al técnico, toda vez que salió a la luz un documento del área deportiva en la que señalaba a Neto, Umtiti y Junior como posibles ventas para el año que viene, al tiempo que decía que Umtiti y Mingueza no estaban preparados para los partidos de alta exigencia. “Umtiti llevaba tiempo fuera por lesión y se ha recuperado bien. Estamos contado con él. Mingueza ha jugado muchos partidos, de central y de lateral. Ya veremos qué puede pasar en el futuro. Cada uno debe demostrar y nadie sabe qué puede pasar en el futuro en este club”, quiso zanjar el técnico del Barcelona.
Contundente, no dio opción a la polémica. “No me molesta a mí y los futbolistas no pueden estar molestos porque hablamos día a día con ellos, y han participado mucho. Un jugador del Barça debe estar preparado para todo. Esto pasa en cualquier club del mundo y no veo ningún problema. Además, mi trabajo es preparar al equipo para los partidos”. Ese y decidir en su medida la plantilla. “No. Todibo es jugador del Barça pero no voy a contar con él”, resolvió sin miramientos porque no cambia al francés por Eric García.
Le toca el Athletic y podría recuperar a Sergi Roberto. Koeman, que ve los títulos lejos, no entiende sin embargo de rendición. “Sabemos nuestra situación en LaLiga y está complicado. Lo intentaremos hasta el día que sea posible. Sobre la Champions… Hay más equipos. No hay uno favorito claro, ahora nos toca el PSG e intentaremos pasar. Este es nuestro trabajo. La ambición es ganar títulos, somo el Barça”, soltó. Aunque dejó la muletilla final: “Pero hay que ser realistas”.
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