El capitán del Atlético de Madrid hizo un gran partido en el Camp Nou. Tanto en las ayudas a todos sus compañeros, como tapando como pudo a Messi o distribuyendo el juego…. Pero todo aquello le acabó pasando factura y terminó el partido con calambres. Y Simeone le pidió un esfuerzo más para que finalizase el encuentro porque ya había agotado las tres ventanas de cambios.
Habrá que ver en estos días su evolución. Para ver si puede estar de inicio contra la Real Sociedad en el Metropolitano. Un partido en el que además de jugarse La Liga el Atlético de Madrid, el capitán alcanzaría en caso de jugar los 500 partidos oficiales. Sería el segundo jugador en la historia en lograrlo. Hasta el momento el único que lo ha conseguido es Adelardo.
La evolución
De momento es duda. Habrá que ver como evoluciona y si este lunes puede entrenarse con el resto de sus compañeros. Recordemos que ya contra el Elche en la anterior jornada fue suplente y en su lugar jugó Kondogbia. Tras estar toda la semana previa entrenando al margen del grupo por esas molestias físicas. Así que en el caso de que no llegase al partido contra la Real Sociedad sería el galo el que lo sustituiría.
Koke está a las puertas de hacer historia, ya sea este miércoles contra la Real Sociedad o en el siguiente partido contra Osasuna. 12 años van a hacer en septiembre de su debut con el Atlético de Madrid. Un estreno que por cierto tuvo el mismo escenario que su partido 499. Poca gente se lo iba a decir por aquel entonces. Aquel día cayeron 5-2 y el equipo estaba en un inicio de Liga regular, más de una década después sale con un 0-0 y como líder. Mucho ha cambiado el nivel del club en este tiempo.
Un mito partido a partido
Un periodo en el que el vallecano se ha hecho con las riendas del equipo. Para ello ha sido clave la llegada del Cholo Simeone al banquillo. En la campaña 2011-12 estaba en la puerta de salida para buscar una cesión porque a las órdenes de Gregorio Manzano no tenía minutos. Y eso que ya había sido importante a las órdenes de Quique Sánchez Flores. El técnico argentino llegó habló con él y le convenció para quedarse y juntos hacer historia.
Unos meses después y tras la salida de Diego Ribas ya se hizo intocable en el once inicial colchonero. Su importancia en el equipo fue creciendo hasta tal punto que el entrenador colchonero llegó a asegurar que era uno de los únicos jugadores intransferibles de la plantilla.
Ahora, aquel chico que fichó el Atlético de Madrid con seis años porque los entrenadores de su hermano se quedaron sorprendidos con su dominio de balón se convertirá en un auténtico mito del club. Un futbolista que a lo largo de su vida sólo ha defendido de manera oficial tres camisetas la del conjunto rojiblanco, la de España y la de la Selección de Madrid en las categorías inferiores.
Source link