Takefusa Kubo (Kawasaki, Prefectura de Kanagawa, Japón, 2001) ya está en Donostia y se convertirá en las próximas horas en jugador de la Real Sociedad y en el tercer fichaje del verano de la escuadra txuri urdin. El futbolista llegó pasadas las ocho y media de la tarde al aeropuerto de Hondarribia junto a su madre en un vuelo procedente de Madrid tras superar la fiebre que demoró su viaje a Gipuzkoa. En la terminal le estaba esperando el director de fútbol txuri urdin Roberto Olabe. El atacante pasará reconocimiento médico médico el martes por la mañana y se espera que también durante el día firme su contrato por cinco temporadas, hasta 2027, con la Real Sociedad.
La presentación oficial se realizará posteriormente en el Palacio de Miramar de Donostia en un acto que será abierto al público, aunque luego acudirá asimismo al Estadio de Anoeta, donde protagonizará la preceptiva rueda de prensa. La idea es que el futbolista se ejercite por primera vez con su nuevo equipo mañana miércoles día 20. Es muy difícil que pueda estrenarse el sábado 23 ante el Borussia Moenchengladbach en Alemania.
6 millones y el Madrid se queda con el 50% de la plusvalía
MD ya informó en exclusiva el sábado las condiciones del traspaso: la Real al final abona seis millones de euros por Kubo a un Real Madrid que se reserva el 50% de la plusvalía de un futuro traspaso. Esto es, si la Real lo vende por 30 el año que viene, el club blanco percibiría la mitad de 24 millones, o sea 12. Además, la entidad blanca tiene derecho preferencial por el jugador, por lo que le bastaría con igualar la oferta económica de un tercero para llevarse al japonés.
La cláusula de rescisión de Kubo asciende a los 60 millones de euros, igual que la de Momo Cho, Brais y los seis canteranos renovados recientemente. Aperribay y Olabe negociaron con el Real Madrid por el jugador el pasado jueves hasta desatascar la operación. El japonés de 21 años ya estaba convencido de venir a Anoeta desde antes, pese a que se habían interesado por él otros equipos de Primera como Osasuna y el Valladolid entre otros. La Real ya sondeó su fichaje en los dos veranos anteriores, pero al final se decidió por otros futbolistas.
Único extracomunitario
Kubo tiene nacionalidad japonesa y, pese a que estuvo en el Barcelona desde los 10 hasta los 14 años y ya lleva cuatro en España desde que le fichó el Real Madrid, no tiene la nacionalidad española por lo que ocupa plaza de extracomunitario. No representa ningún problema en la Real porque será el único, toda vez que el australiano Maty Ryan goza de la nacionalidad británica. En el Madrid, el cupo estaba cubierto con los brasileños Militao, Vinícius y Rodrygo Goes.
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