Hacía mucho tiempo que Kyrie Irving no entraba en directo en su Twitch personal para interactuar de primera mano con sus seguidores. En una intervención que duró más de una hora, realizada momentos después de la última derrota de los Dallas Mavericks, el polémico base entró al trapo en varios asuntos sobre la competición y también más allá de la misma. Lo primero que hizo el jugador fue disculparse con sus fieles conectados, y luego pasó a soltar alguna que otra bomba.
“Siento que se me ha mantenido captivo a veces, porque no podía entrar en mis redes sociales para hablar de verdad, para hablar sobre lo que es verdadero”, comentó mientras encendía uno de sus habituales inciensos que ha llevado a la fama por usarlos incluso en los pabellones de sus equipos.
¿Cómo puedo ser libre si sé que todavía hay niños trabajando en las minas de cobalto en el Congo, fabricando Teslas?”
De entre todos los comentarios vertidos en su larga intervención, uno que fue especialmente polémico fue el relacionado con la explotación laboral infantil y la fabricación de Teslas en África. “¿Cómo puedo ser libre si sé que mi gente todavía no es libre en África? ¿Cómo puedo ser libre si sé que mi gente indígena en Australia no es libre? ¿Cómo puedo ser libre si sé que todavía hay niños trabajando en las minas de cobalto en el Congo, fabricando Teslas?”, soltó el jugador en un ataque indirecto pero punzante hacia Elon Musk, propietario de la marca de vehículos eléctricos.
Irving habló sobre muchos otros temas que le afectan a él y la competición. Por ejemplo, criticó con crudeza el mundo de las apuestas deportivas. “La comunidad de apostantes se ha introducido en el mundo del baloncesto, y voy a denunciarlo… todas estas distracciones perjudican al juego, y solo quiero decir que echan a perder el juego”, comentó.
También tuvo palabras de crítica hacia los medios y el público. “Hay quince tipos en el equipo y yo soy el cáncer en el vestuario. Así es como se vende… ¿por qué soy un objetivo?”, se quejó. Sobre el racismo persistente en la sociedad de hoy, Irving concluyó que la realidad es que su gente lleva mucho tiempo en guerra: “Todo lo que digo es que mis ancestros y mi familia llevamos en guerra los últimos 500 años”.