La compañía Heinz, con base en Pensilvania, encendió el debate lanzando un tuit en su cuenta del Reino Unido con lo siguiente: “FYI: ¡el kétchup va en la nevera!”
Heinz intentó resolver esta disyuntiva lanzando una encuesta en su cuenta de Twitter. En la publicación hubo opiniones divergentes y divertidas sobre este asunto que ha desatado controversia en los hogares de muchas familias.
Que comience la batalla entre los “neveristas” y los “exterioristas”.
En el rincón de los “neveristas”, quienes defienden que el kétchup pertenece a las frías y misteriosas profundidades de la nevera, encontramos a los amantes del orden y la tradición. Que, según ellos, el kétchup en la nevera garantiza una textura fresca y la conservación adecuada de su sabor. Afirman que abrir la puerta de la nevera y encontrar un frasco de kétchup bien frío es un placer inexplicable, una especie de “salsa en el paraíso” para aquellos que valoran el rigor en la vida.
Pero, en el otro rincón, se encuentran los valientes “exterioristas”, quienes defienden con pasión que el kétchup está mejor fuera de la nevera. Estos rebeldes defensores del libre flujo de los alimentos argumentan que el kétchup es una sustancia ácida y está lleno de conservantes, por lo que no necesita el frío para mantenerse fresco.
En medio de esta batalla, hay quienes han encontrado una “solución”: la “alacena intermedia” que no es ni fría y tampoco caliente; tiene una temperatura fresca. Así, se aseguran de que la salsa se mantenga en buen estado sin sacrificar la temperatura ideal para disfrutar de su sabor. Con esta opción, parece que ambos bandos pueden vivir en armonía. ¡al menos, evitar discusiones innecesarias mientras se come!
Mientras que otros dicen que no hay una diferencia notable entre el kétchup guardado en la nevera y el kétchup que vivía al aire libre.
Al final la encuesta en la cuenta de Twitter le cedió la victoria a los neveristas con 63% a su favor, mientras que los exterioristas tuvieron 37% en la encuesta. Así que la mayoría opinó que este condimento se debería de guarda en la nevera.
La ubicación del kétchup seguirá siendo motivo de disputa en los hogares de todos. Mientras tanto, los restaurantes de comida rápida deberán tomar partido en esta guerra del sabor.
Y tú, ¿cuál es tu opinión? ¿Eres un neverista o te atreves a desafiar las normas y unirte a los exterioristas? El destino de tu kétchup está en tus manos. ¡Que continue la kétchup batalla!